A Edwin Navarro, un oficial de Tránsito de San Carlos, le correspondió atender este viernes el peor caso de su carrera.
La muerte de un bebé de casi dos años le rompió el corazón al tráfico, sobre todo porque se acordó de sus dos nietitos recién nacidos.
El lamentable hecho sucedió pasadas las 11 de la mañana en la urbanización Selva Verde, en Ciudad Quesada de San Carlos. Las autoridades recibieron la alerta sobre un menor que había sido atropellado.
Navarro fue uno de los primeros en llegar a la escena, sin embargo, no fue mucho lo que pudo hacer pues los familiares del pequeñito, de apellido Araya, rápidamente lo subieron a un carro particular para llevarlo de emergencia al hospital de San Carlos. Lamentablemente murió en el centro médico.
El tráfico indicó que la versión de los hechos aún es un poco confusa, pero en apariencia todo sucedió cuando los adultos que cuidaban al pequeño estaban conversando con el conductor del vehículo tipo pick up que se vio involucrado en el fatal hecho.
“Pudo haber un descuido de los adultos, poca supervisión al menor. Cuando el muchacho retrocedió el vehículo le pasó por encima al chiquito. Como que las personas estaban ahí hablando, incluyendo adultos y niños, es lo que tengo entendido”, dijo.
Otra de las versiones indica que, en un descuido, el pequeñito salió de su casa sin que nadie se diera cuenta y ahí fue cuando sucedió el incidente. Se desconoce qué relación había entre el menor y el conductor del vehículo.
Son la alegría de una casa
Aunque en otras ocasiones le ha tocado atender accidentes de tránsito con resultados muy tristes, este es uno de los que más le ha llegado a Navarro, quien tuvo que aguantarse las ganas de llorar ante el atropello del pequeñito.
Navarro dijo que se le dolió mucho porque él sabe la alegría que los niños aportan en un hogar, actualmente lo vive con sus nietitos, a quienes adora con toda su alma.
“Es algo muy duro, yo tengo dos nietos pequeñitos, uno de dos meses y otro que nació ayer, entonces imagínese, uno esta muy sensible”, contó.
Al oficial también se le rompió el corazón al enterarse que el pequeñito iba a cumplir dos añitos el próximo mes de setiembre, por lo que se imaginó la ilusión que esto significaba para toda su familia.
En cuando al conductor involucrado, cuya identidad no trascendió, Navarro explicó que este contaba con todos sus papeles al día y que el resultado de la prueba de alcoholemia fue negativa.
Lucharon por su vida
El doctor Alberto Argüello, asistente de la Dirección General del hospital San Carlos, contó que el bebé llegó en una condición muy delicada al centro médico; sin embargo, los médicos que lo atendieron nunca tiraron la toalla e hicieron todo por salvarle la vida.
“Me informan de un niño de aproximadamente un año y 10 meses, quien fue víctima de un accidente de tránsito, fue traído por un familiar al servicio de emergencia, pero ya este no presentaba signos vitales, se trabaja durante cerca de 20 minutos con maniobras de reanimación, pero lamentablemente no funcionaron”, indicó el médico.
Argüello destacó que, pese a los esfuerzos que se hicieron, no tenían mucho que hacer por el menor, pues este presentaba lesiones muy graves en su cabeza y tórax.
Sonrisa que iluminaba
La muerte del pequeñito no solo ha sido un golpe muy duro para su familia, sino que todo el barrio está lleno de dolor, pues el bebito era muy querido.
Así lo recordó Naylea Murillo, una de sus vecinas, quien contó que siempre recordará su hermosa sonrisa.
“Era un chiquito muy sonriente, siempre pasaba jugando con los tíos, pasaba en una pura risa, se llevaba muy bien con el papá, lo que más lo destacaba eran las risas”, recordó.
Murillo dijo que desde que el pequeño nació llegó a cambiarle la vida a la mamá, pues en él encontró su felicidad, lo mismo pasaba con la abuelita, quien lo chineaba a más no poder.
“Era un chiquito muy obediente, para nada molestaba”, añadió.
La joven confirmó que iba a cumplir dos añitos el próximo martes 18 de setiembre.