Los tres hermanos de 13, 7 y 5 años que estaban solos en una casa y que se salvaron después de haber quedado atrapados en las llamas en San Miguel de Desamparados, están ahora bajo protección del Patronato Nacional de la Infancia (PANI).
Patricia Hernández, gerente del PANI afirmó que están en un albergue y que esta medida es temporal mientras trabajan con familiares que puedan hacerse cargo de los niños, de no encontrar algún familiar seguirán bajo la tutela de la institución.
La funcionaria agregó que contra la mamá de los niños ya existía un expediente abierto porque fue víctima de violencia doméstica y a ella la acusaban de negligencia con los menores.
“Se estaba trabajando con ella terapia emocional, pero luego del incendio se tomó una medida drástica, el proceso de valorar otros parientes es de seis meses o bien luego se llevaría un proceso judicial”, explicó Hernández.
El incendio ocurrió este lunes en la tarde, del bar Pecos, en el cruce de San Miguel, 150 metros al oeste, los niños lograron salir luego de que saltaran una tapia y los vecinos pusieran una escalera para que salieran.