Con la esperanza de tener un futuro mejor, Tatiana Matamoros dejó su natal Jinotega, en Nicaragua, para probar suerte en Costa Rica, pero el viaje terminó encontrando la muerte.
El cuerpo de la muchacha, de 20 años, fue encontrado la noche del viernes 28 de diciembre a la orilla de una calle en Vuelta de Jorco de Aserrí. El cadáver presentaba un fuerte golpe en la cabeza.
El medio nicaragüense La Nueva Radio Ya dio a conocer que el cuerpo de “Tatty”, como le decían de cariño, fue repatriado la mañana del martes a la comunidad de Pantasma en el departamento de Jinotega.
El cuerpo fue recibido por familiares y amigos que lo llevaron cargaron hasta la humilde casa de sus papás, donde fue velado algunas horas antes de llevarlo al cementerio local.
De acuerdo con el medio pinolero, los familiares de “Tatty” contaron que hace un año la joven decidió dejar la comunidad de Cuatro Esquinas, en Santa María de Pastasma, para venir a Costa Rica.
Según trascendió durante el tiempo que estuvo en Costa Rica, la muchacha vivió San José y se ganaba la vida trabajando en un restaurante en la capital; sin embargo, sus familiares no dieron más detalles de su vida en Tiquicia.
En cuanto al homicidio, el OIJ indicó que hasta el momento no ha establecido un posible móvil y que todavía no han encontrado evidencias como para elaborar una hipótesis. Matamoros no contaba con antecedentes en el país y se cree que su cuerpo fue lanzado a la calle desde un carro en movimiento.
Los familiares de la muchacha lograron identificarla por medio de fotografías que empezaron a circular en redes sociales en las cuales se veía su rostro y un tatuaje de rosas que tenía en un antebrazo.