Los restos del estadounidense Yoshua Byrne, quien estaba desaparecido, fueron hallados a cuatro kilómetros del lugar donde fue arrastrado por la corriente de la quebrada Pozo Azul de Dominicalito, en Osa.
Byrne fue visto por última vez el jueves en la tarde, cuando intentó pasar el riachuelo en un carro en el que también iban su esposa e hija de 10 años. Una cabeza de agua los sorprendió y lograron salir, pero la fuerza del agua arrastró al norteamericano, quien no pudo salvarse.
El cuerpo fue encontrado este sábado a las 11:30 a.m. en el lugar conocido como rocas de Amancio en Dominicalito de Osa, entre un montón de troncos que hay en la playa.
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El extranjero y su familia habían llegado el miércoles al país, pretendían disfrutar de una segunda luna de miel; sin embargo, fueron víctimas del mal tiempo provocados por dos ondas tropicales.