Luego de vivir los peores días de sus vidas, el esposo y la familia de Arantxa Gutiérrez López, la turista española asesinada en Tortuguero, hablaron sobre el atroz crimen que los tiene viviendo una pesadilla de la cual creen que nunca podrán despertar.
La familia convocó una conferencia de prensa este miércoles para agradecer a todas las personas y autoridades que los están ayudando en este momento tan complicado, pero también para exigir justicia para Gutiérrez.
El encargado de dar el mensaje fue Miguel Ángel Escribano Ortega, esposo de Arantxa, quien contó que desde hace dos años habían planeado con mucha ilusión este viaje a Costa Rica.
“Hemos perdido un ángel, una persona de esas que nacen solo de una vez en cuando y nosotros hemos tenido la suerte de tenerla entre nosotros. Aunque lo diga yo sé que hay miles de personas en España que lo están diciendo en redes sociales, hay cientos de pacientes suyos huérfanos de sus tratamientos de fisioterapia”, dijo.
Escribano dijo que Arancha era la persona más generosa que cualquiera podría conocer y que en los cinco años que estuvo a su lado aprendió mucho de ella, como por ejemplo la pasión que tenía por cambiar el mundo, por hacerlo mejor.
“Arancha quería cambiar el mundo pero ahora decía que no podía hacerlo porque era una utopía, pero en estos cinco maravillosos años de estar a su lado y un día antes del terrible asalto me pidió que la ayudará a hacerlo, que otro mundo es posible, que tenemos que iniciar una tendencia diferente de la que llevamos, que tenemos un planeta maravilloso, que podemos amar las personas y no dañarlas”, comentó.
Una pesadilla
Miguel explicó que detrás de esta tragedia solo existe un culpable, pues su esposa no hizo nada malo, ella solo quería disfrutar de las bellezas que ofrecía Costa Rica, por eso es que pide a las autoridades que no descansen hasta que el responsable sea condenado por lo que hizo.
“Queremos a las mujeres vivas, las queremos iguales, dignas y con orgullo, permítanlo. Costa Rica permítalo, cuiden a sus mujeres, a su gente. Vinimos a vivir un sueño y estamos viviendo una pesadilla de la que nosotros nunca nos vamos a despertar”, añadió.
Mientras luchaba por aguantar las lágrimas Escribano dijo que lo sucedido es un reflejo de un terrible problema que carcome a la sociedad como lo es la violencia machista, en la cual se boicotea la dignidad de la mujer en favor de la masculinidad.
Nadie los advirtió
El español también señaló al hotel en el cual se quedaron en Tortuguero, asegurando que desde que llegaron nadie les advirtió sobre los riesgos que podían haber en esa zona, la cual describieron como maravillosa.
“Tortuguero nos decían que era un lugar muy seguro, en el que no pasaba nada, todo mundo nos decía que era una maravilla, el hotel incluso no tenía ningún aviso puesto, no nos aviso de ningún puesto, y después de la tragedia nos vamos enterando de cosas que al parecer nadie sabía”, aseguró.
El hombre concluyó diciendo que sabe que los españoles seguirán visitando este hermoso país, pero pidió que al menos se les informe de los peligros que pueden encontrar en sus vacaciones.
Finalmente Escribano volvió a pedirles a las autoridades que no descansen hasta detener al hombre que le arrebató al amor de su vida.