Sucesos

Cicatrices y huellas dactilares lograron identificar a una de las tres personas que murieron en un incendio en La Sabana

Autoridades aún no determinan qué causó las llamas en un rancho

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Las cicatrices y huellas dactilares le permitieron a los médicos forenses identificar a la segunda víctima mortal de un incendio que consumió un rancho en Sabana norte, San José y cobró la vida de tres hombres, el lunes 9 de julio anterior.

Se trata de Emel Dionisio Cerna Cerna, de 69 años y oriundo de San José, quien de acuerdo con sus familiares era alcohólico. Salvador Cerna, hermano de Emel, afirmó que su ser querido siempre tuvo una casa digna donde llegar y que muchas veces lo intentaron sacar de la indigencia, pero él se perdía y no les daba signos de vida.

De cariño le llamaban “el Negro Dennis”, era el hermano mayor de cuatro y a pesar de su adicción, siempre fue un hombre honrado y no le gustaban las injusticias.

“Mi hermano se desaparecía un mes y luego aparecía, la última vez que lo vi fue un mes antes del incendio. Él era de esas personas que si uno le da ¢10 mil y lo manda hacer un mandado, lo hacía y le devolvía hasta el último cinco del vuelto. El día que nos vimos me dijo que estaba viviendo en un ranchito con otros hombres, incluso recuerdo que me comentó que a uno de ellos lo pasaba regañando porque era grosero y que le cocinaba a otro de los compañeros con los que vivía”, recordó el hermano.

Las autoridades afirmaron que el rancho donde vivían los tres hombres no tenía electricidad, ellos sacaron la silla de rueda de uno de las víctimas. Foto: Alonso Tenorio (Alonso Tenorio)

Don Salvador, agregó que el día del incendio al ver la noticias pensó “¡Ojalá Dios los agarre confesados!”, pero no fue hasta varios días después que recordó que su hermano le dijo que vivía en un rancho en ese lugar.

“No nos han dicho qué pudo haber iniciado las llamas, pero tampoco le quiero hacer cabeza a eso, porque nada devolverá a mi hermano y él ya está descansando en un lugar donde sabemos que halló la paz”, mencionó el hermano.

A él lo sepultaron en el cementerio General en San José.

El rancho quedaba en Sabana Norte yendo hacia el hotel San José Palacio, para llegar se debía bajar por un trillo. Foto: Alonso Tenorio (Alonso Tenorio)

La primer víctima que el OIJ identificó fue el limonense José María Morales Avilés, de 62 años. La tercera persona que murió aún no ha sido identificada, aunque los exámenes forenses se mantienen.

Las autoridades no han determinado qué provocó las llamas, solo han indicado que el rancho no contaba con electricidad.

Alejandra Morales

Alejandra Morales

Bachillerato en Periodismo en la Universidad Internacional de las Américas y licenciada en Comunicación de Mercadeo en la UAM. Con experiencia en temas de sucesos y judiciales.

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