Eithan de Jesús Brenes Alvarado, es el costarricense número cinco millones gracias al terremoto de Cinchona, ocurrido el 8 de enero del 2009 y con magnitud de 6,2 grados según el Ovsicori.

Debido al suceso que sacudió al país hace casi 10 años y en el que murieron 23 personas, se conocieron Madelyne Alvarado y Reinier Brenes, los papás de este hermoso muñecote.

Aquel día de verano, Madelyne estaba en su casa en Varablanca de Heredia, con su mamá doña Dignora Calvo y su hermana Kimberly, cuando se vino el meneón a la 1:22 de la tarde.

“Yo vi como la casa se agrietaba. Había piso de cerámica y vi como se hacía como un naipe. Cuando miraba películas de esas de desastres uno decía que miedo, eso nunca pasará aquí y era como estar metida en una de esas cintas”, recuerda doña Madelyne.

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Las paredes se derrumbaron, el piso estaba lleno de grietas y doña Dignora y doña Madelyne quedaron aturdidas y dentro del caos no encontraban a Kimberly que al momento del sismo se estaba bañando.

“Imagínese que cuando mi mamá me preguntó por ella yo le dije ‘creo que está muerta porque no aparece por ningún lado'. Al ratico, Kimberly apareció con un golpe en la cabeza”, dijo.

A la hermana menor de Madelyne le cayó un block en la cabeza y se desorientó por unos minutos.

“¿Por qué está la casa está tan desordenada?, ¿qué pasó aquí?”, se preguntó Kimberly cuando reaccionó.

La destrucción fue tal que la familia se tuvo que ir a vivir donde un familiar cercano por un tiempo, pero también en el garaje de un tío.

"No le tenía miedo a los temblores, pero desde esa vez quedé traumada. Ahora cada vez que hay un sismo me pongo a temblar, me da miedo que se repita la tragedia”, dijo la mamá del bebé cinco millones.

Ventana al amor

Cuando la tragedia pasó, el papá de Madelyne logró estabilizarse a punta de esfuerzo en lo económico (es comerciante de ganado) y pudo comprar una casita, pero en Fraijanes, un sitio relativamente cercano, pero ya en la provincia de Alajuela.

“Mi papá necesitaba que le instalaran unos vidrios en la casa y contrató a un muchacho. El joven que llegó era Reinier (Brenes, el papá de Eithan) y desde ese entonces empezamos a hablar. De aquella tragedia salió algo bueno”, contó Madelyne.

Ellos tuvieron un noviazgo de cinco años y se casaron hace tres. Como todos sabemos, el bebé nació el 1 de septiembre de este año, a las 9:27 de la noche en el hospital de Heredia.

Bebito es manudo

Su mamá se siente muy orgullosa de tener en la casa al bebé cinco millones y también contó que Eithan no es herediano, más bien es alajuelense.

“Nosotros vivimos en Fraijanes, en Alajuela y todo el control lo hice en Alajuela".

Entonces, ¿por qué Eithan nació en el hospital San Vicente de Paul de Heredia?

Doña Madelyne dice que una de las doctoras con quien llevó el control trabajaba en Alajuela y en Heredia y algunas citas eran en el hospital florenses.

“Un doctor que me vio en el Hospital de Heredia me dijo que el bebé estaba muy grande, y que no se había acomodado. Que debía nacer por cesárea y me advirtió que en Alajuela no me harían ese procedimiento. Me dijo que me pondrían suero y harían todo para que fuera natural”, comentó.

Ese día era viernes 30 de agosto y la dejaron internada porque ya empezaba a sentirse mal, con algunos dolores.

En ese momento, la familia había escuchado que por esos días nacería el bebé cinco millones, pero doña Madelyne ni importancia le tomó porque estaba pensando en su hijo.

“El bebé ya se había atrasado tres días y quince días antes me pusieron a caminar para ver si bajaba. Fue cuando empezaron a decirme que era difícil que saliera por el canal del parto. ‘Yo que usted opto por la cesárea’, me decían porque se puede quedar pegado en la pelvis y ahogarse porque tenía mucho líquido en el estómago.

“Cuando me revisaron el sábado me dijeron que andaba el rumor de que el bebé cinco millones podía nacer en ese hospital, o en Alajuela, Cartago en cualquier hospi del país y que mi bebé era una posibilidad”, recordó doña Madelyne.

Dijo que cuando la revisaron en la tarde, botó mucho líquido y que la sala de operaciones estuvo ocupada en la mañana por otras personas, hasta que finalmente la metieron al quirófano.

“Cuando me pusieron anestesia lo único que pensaba era que mi bebé estuviera bien y cuando sacaron a Eithan escuché a un doctor cantar. ‘¿Qué es eso?’, me preguntaba yo. Alguien cantando cuando lo operan a uno. Llegó una enfermera y me dijo que nació a las 9:27 de la noche, la hora exacta a la que esperaban al bebé cinco millones, pero que nada era oficial.

"Sin embargo, los doctores aplaudían y me felicitaban y me pusieron a mi bebé en la cara y yo solo pensé: santo Dios”.

Nunca faltan...

Con toda la felicidad que embargaba a la familia, a doña Madelyane la puso triste algunos comentarios en redes sociales de gente que decía que el nacimiento había sido programado para que Eithan fuera el afortunado.

“Me quedé asustada de ver cada comentario, hasta con malas palabras para el bebé. Yo decía, qué ignorantes, no saben nada. ¿Cómo juzgan a un bebé que no tiene noción de nada? Decían que buscábamos cosas. Yo lo que digo es que fue el tiempo de Dios, si el bebé estaba para nacer a esa hora, estaba para nacer a esa hora y punto. Ningún doctor va a poner en riesgo mi vida por eso”, dijo.

Cuando ya había pasado mes y medio, ella estaba en su casa alimentando al pequeño cuando interrumpieron la señal para dar la información de que Eithan era oficialmente el habitante cinco millones.

“Estaba muy contenta, llamé a mi esposo y le dije que lo habían confirmado. Fue una contentara, empezó a llamar la familia, como cuando nació”.

La fama del bebé fue tal que cuando lo sacaba de la casa, la gente le decía. ‘Ese bebé salió en la tele y cuando explicaba quien era, me lo pedían para tomarse una foto. Muchos tienen foto con él. ¿Sabe quién se tomó una? El hermano del habitante un millón. Un día llegó y lo reconoció”, comentó.

Eithan es un niño grande, comelón que ya dijo sus primeras palabras como agú, ma, mu (vaca), y nació con una mata de pelo que al mes y medio lo llevaron a su primer corte. “Ya no se le veían ni las orejitas”, dijo la madre.