La Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) hizo un llamado a los conductores a utilizar gasolina regular debido al faltante de súper producto de la huelga.

En el plantel de Ochomogo no hay súper, aunque sí hay en los planteles de La Garita y Moín; sin embargo, la locura de los choferes por llenar el tanque hizo que se agotara en muchas gasolineras.

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Según explicó Alejandro Muñoz, presidente ejecutivo de Recope, solo 18 de cada 100 carros del país requiere usar súper, específicamente habló de carros de lujo como los Mercedes Benz.

“La gente debe tener calma, cuando haya una situación de desabasto nosotros lo comunicaremos, por el momento hay gasolinas, diésel y gas. Les pedimos también paciencia, hay que adecuarse. Si una gasolinera no distribuye combustible se debe llamar a la Aresep para que ellos constaten si hay acaparamiento o no”, indicó Muñoz

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El funcionario indicó que en plantel de Moín hay suficientes reservas de súper y para esta semana se espera que atraque un barco con gasolinas, no obstante, el otro gran problema que afronta la institución son los daños en el poliducto causados, en apariencia, por los mismos trabajadores que están en huelga.

Ruda bronca

El poliducto es la red de tuberías que utiliza Recope para bombear combustible, como gasolinas o diésel, desde su plantel en Moín hasta Ochomogo y de allí al plantel de Barranca, en Puntarenas.

Aparte del daño grande que ocurrió el domingo en la noche en La Garita, funcionarios de Recope han detectado siete tomas ilegales más, por lo que no se ha podido poner en funcionamiento dicho sistema hasta terminar las reparaciones.

Otra gran bronca es que como la gran mayoría de funcionarios de Recope está en huelga, solo una mínima cuadrilla de cuatro trabajadores realiza desde este lunes la inspección de toda esta tubería y la institución está buscando ayuda de expertos internacionales para que vengan a colaborar. El poliducto cuenta con siete líneas de distribución que abarcan en su totalidad 533 kilómetros.

En la actualidad hay 680 funcionarios laborando. Recope tiene un planilla de 1720. Aún así en La Garita se cargaron este martes 276 cisternas.

Ingenieros, técnicos, secretarias y abogados llevaron una capacitación de un día para ayudar a cargar y facturar en los planteles donde otros compañeros de fueron a huelga.

Con esta cantidad de personal no se puede funcionar las 24 horas que se requiere.

Los trabajadores que sí están laborando se han topado en los planteles con candados cambiados, materiales encadenados, cables cortados, sabotaje de sistemas eléctricos. Todo esto atrasa más el servicio. Todo esto mientras en las afueras los manifestando impedían el paso de cisternas.

Por otro lado, los empleados que están laborando han sufrido insultos y a dos funcionarios de Moín les balearon la casa.

Policía toma Barranca

La noche del lunes, a eso de las 10 p.m. oficiales de la Fuerza pública tomaron el plantel de Barranca para permitir el paso de cisternas. La intervención fue directa a los manifestantes lanzando gas lacrimógeno.

Hubo al menos cinco manifestantes golpeados. En esta intervención policial actuaron al menos 150 oficiales, los cuales destruyeron los toldos donde se ubicaban los huelguistas.

Tras este altercado un funcionario del ICE fue arrestado y llevado a la delegación policial de Chacarita.

Colaboró: Andres Garita, corresponsal.