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En un día nublado y gris, pero iluminados por el amor más grande de su angelito, así llegaron Pamela Rojas y Marco Pérez al hospital de México para enviar al cielo un globo en memoria del pequeño Gael, quien murió antes de nacer.
Por segundo año, el personal médico de ese centro médico organizó una actividad en solidaridad con las familias que perdieron un bebé, todos participaron en una misa presidida por el presbítero Guido Villalobos a las 9 a.m. A eso de las 10:15 a.m. se dio la liberación de los globos.
Cada una de las 11 parejas que participaron de este acto recordó a los pequeños que se fueron al cielo muy pronto.
En el caso de Pamela y Marco, de 26 y 29 años respectivamente, Gael fue su segundo bebé, quien nació después de Lindsay. Esta pareja, del Roble de Alajuela, está esperando ahora a Emma, quien nacerá en un mes.
“Para nosotros él nació, lo registramos, tenemos fotos de él y nuestra hija mayor sabe que tuvo un hermanito. Estas actividades son muy importantes porque cuando uno pasa por esta pérdida piensa que es el único que la sufre, pero hablar y compartir el dolor con todos los que nos rodean ayuda a superar la pérdida y seguir adelante”, explicó Pamela.
Marco, por su parte, dice que al principio es un momento muy duro porque desde antes de que el bebé nazca se sueña con verlo jugar fútbol o como todo un profesional. "Todos en la familia lloramos y hablamos, lo que nos ayudó a salir adelante es que sabíamos que nuestra princesa (Lindsay) nos necesita y ahora que Emma viene en camino tenemos que salir adelante”, explicó.
Esta actividad es parte de los esfuerzos de médicos y enfermeras que buscan prevenir las muertes perinatales, bebés que pierden la vida entre las 22 semanas de gestación y hasta cuatro semanas después del parto.
La idea es que los papitos, de una manera simbólica, liberen con el globo el dolor que sienten luego de la pérdida y que esto les permita seguir adelante con el recuerdo del angelito que se fue al cielo antes de lo pensado.
Saray Torrentes, jefa del Área de Obstetricia de este centro médico, explicó que ese momento es importante también para médicos y enfermeras, quienes trabajan para evitar estas muertes y viven de cerca el dolor de las familias que en un instante pasan de una alegría inmensa al dolor más grande.
“El objetivo es ayudar a los papás a superar su dolor, el año pasado lo hicimos con liberación de mariposas y este año con globos. Hemos visto que, desde el punto de vista de la psicología, les ha ayudado mucho para superar esta etapa, para que liberen y dejen ir ese bebé y puedan no olvidar, pero sí vivir con el recuerdo sin dolor”, aseguró Torrentes.
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