Todavía con el corazón arrugado del dolor porque el OIJ destruyó el expediente de su hija desaparecida en 1989, doña María de los Ángeles Blackshaw García, recibió este martes, víspera del Día de la Madre, un regalazo por parte del criminólogo Gerardo Castaing.
El exagente del OIJ la visitó para confirmarle que se va a meter de cabeza con el caso de la desaparición de Wendolyn, la cual se dio el 4 de agosto de 1989, cuando la niña tenía 8 años.
A la 1:45 de la tarde, Castaing llegó a la casa de doña María de los Ángeles, donde lo esperaba ella con su hija Yahaira, quien tenía dos años cuando su hermana se perdió. El criminólogo conversó con ellas hasta las 3 de la tarde.
El investigador comenzó de inmediato, no había ni cruzado la puerta de la casa y ya había hecho tres o cuatro preguntas, de hecho, en el camino a la casa de doña María de los Ángeles, consultó a dos vecinos que iban pasando sobre el paradero de dos personas que vivían en el barrio por aquellos días de finales de los ochenta.
“Aquí estoy, todavía con mucho dolor en el corazón al comprobar que el OIJ destruyó el expediente del caso de mi hija, como le dije ayer, no entiendo por qué lo hicieron si el caso no se ha resuelto”, nos dijo la mamá.
Una madre jamás olvida
El rostro de dolor en verdad que le cambió cuando Castaing fue poco a poco explicándole por qué se encontraba en su casa.
Con mucho cariño doña María de los Ángeles le respondió todas las preguntas que hizo el investigador, quien tomó la decisión de arrancar de cero, sobre todo ahora que ni el OIJ tiene un solo dato del caso.
Ahora sí todos los detalles vuelven a ser importantísimos, incluso, los más pequeñitos, por dicha la mamá recuerda todo, a pesar de que ya pasaron 29 años.
“La mañana del 4 de agosto de 1989 yo dejé a Wendolyn montadita en el bus que la llevaba a la escuela, le dije: “ya sabe, vaya directo y no vuelva a ver a nadie”, comentó la mamá.
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El investigador le recordó a la mamá y a la hermana de la niña desaparecida, que ahora todo pequeño recuerdo es fundamental, por eso, hasta el recuerdo de que al irse para la escuela Roberto Cantillano, en Zetillal de Guadalupe, iba con un bulto azul que tenía un arcoiris pintado en el centro y una sombrilla azul con amarillo por si la cogían los aguaceros de agosto.
Castaing reconstruirá el caso
“Voy a ir despacio, pero con paso firme, quiero reconstruir todo, por eso tengo que volver para realizar el viaje que hizo Wendolyn desde la escuela hasta donde la última persona que la vio con vida. Wendolyn se perdió a eso de las 12:30 p.m.
“Hablaré con todos los familiares que así lo quieran, con los vecinos de la época y con quien tuvo relación con el caso, incluso, en aquellos años se buscó por cielo y tierra a un taxista, pues también hay que retomar esa búsqueda”, explicó Castaing.
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A pesar de que han pasado 29 años, el caso de Wendolyn ha dado un giro total con la llegada de Castaing.
“Le cuento algo, desde hace como año y medio he sentido el gusanito de meterle mano a este caso, ahora que La Teja lo recordó es el momento ideal, utilizaré toda mi experiencia y mis recursos para luchar por darle una solución a la extrañísima desaparición de una niña de ocho años a plena luz del día, en una zona con muchos vecinos y en la que todos dijeron siempre que no vieron nada”, aseguró el experto.