Los sindicatos y el Gobierno, tras 15 horas de reunión, alcanzaron este sábado por la mañana un “acuerdo”, en el que los primeros pusieron unas condiciones, las cuales no quisieron revelar.
Si finalmente los grupos sindicales aceptan el acuerdo, abrirán una mesa de diálogo que será anunciada este domingo a las 3 de la tarde.
En caso de tener una respuesta positiva, la huelga terminará momentáneamente el lunes, pero si es negativa, el movimiento se mantendrá por tiempo indefinido.
Según el analista político y digital Esteban Mora, esta situación lo único que demuestra es que los gremios están perdiendo fuerza.
“La declaratoria de ilegalidad de la huelga en varias instituciones los está haciendo pensar que están mal. Problemas como el del hospital San Juan de Dios (con los quirófanos) son pequeños golpes que los están debilitando. Si uno lo piensa más allá, el acuerdo al que pudieron llegar es porque los sindicatos se están quedando sin el santo ni la limosna, por eso para ellos es mejor negociar ciertos beneficios ahora que después cuando tengan todo perdido”, dijo.
“Quiero pensar que los líderes de los sindicatos sabían, desde el primer día que empezaron con esto, que no iban a poder quitar el plan fiscal de la corriente legislativa y me imagino que también saben que, a excepción del MEP y la Caja, todas las demás instituciones están funcionando con normalidad”, añadió.
Aunque no se animó a especular qué puntos se negociaron, dijo que probablemente uno fue que no les rebajaran el salario por los días que estuvieron en huelga.
“Si el Gobierno acepta eso quedaría muy mal parado ante la gente, porque una parte importante del país está esperando que haya algún tipo de castigo contra ellos”, añadió.
Este domingo se cumplirá el día número 21 de manifestaciones en contra del proyecto que pretende mejorar la finanzas públicas.