Al menos 30 personas fallecieron víctimas del derrumbe de un puente de una autopista italiana cerca de Génova, una “terrible tragedia”, según reconoció este martes el ministro de Transporte, Danilo Tonnineli.
Hay una treintena de muertos y muchos heridos graves", indicó a la prensa Matteo Salvini, ministro del Interior, quien se comprometió a individualizar a los responsables.
“Delante de los italianos me comprometo a determinar las responsabilidades de un desastre tan inaceptable”, anunció indignado el ministro, quien viajará el miércoles a Génova.
Varias personas se encuentran bajo los escombros del puente Morandi, de unos 100 metros de altura, tras la caída de una decena de vehículos al vacío, según explicó el director de la central de emergencias 118 de Génova, Francesco Bermano.
El canal de noticias SkyTv aseguró que entre los escombros se encuentran decenas de personas atrapadas en sus automóviles.
"Una escena apocalíptica", aseguró un testigo a la emisora Isoradio, especializada en el tráfico en las autopistas.
"Estamos siguiendo esta inmensa tragedia minuto a minuto, agradezco a los bomberos que están salvando vidas", adelantó por su parte el ministro del Interior, Matteo Salvini.
La zona del accidente es muy poblada y según la empresa encargada del mantenimiento de las autopistas, Autostrade, el tramo que colapsó estaba en obras.
Todos los hospitales de la región han sido movilizados para recibir a los heridos, mientras equipos de bomberos y socorristas se encuentran en el lugar con perros especializados en la búsqueda.
El derrumbe del viaducto afectó también parte de la fábrica Ansaldo Energía de Génova, una de las principales plantas de producción de energía eléctrica de Italia.
La entrada de la fábrica se encuentra bajo el viaducto, pero al parecer sólo el estacionamiento se vio afectado. La planta está vacía debido a la fiesta del 15 de agosto, cuando todo el país se paraliza.