Marilin Gamboa, presentadora del programa “7 Estrellas” de Teletica, puede rajar que tiene el corazón puras tejas porque lleva meses resistiendo los más grandes sustos que le pegan sus compañeros.
La guapa conversó con La Teja y nos contó sobre las constantes bromas que le hacen los miembros del equipo del canal del trencito cada vez que tienen oportunidad.
Gamboa asegura que el asunto tiene cola, viene desde hace muchos años, pero es hasta ahora que las personas ajenas al canal lo saben porque con las redes sociales es más fácil que se den a conocer las cosas.
Camarógrafos, asistentes y periodistas como Wálter Campos, se las ingenian para pegarle los sustos donde sea y en cualquier momento. Si hay algo que se le debe reconocer a los cómplices de las bromas, es que son muy creativos y bien pacientes.
“Ahora todos lo hacen (risas), imagínese que hasta Nilsen Buján, que es tan serio, se apuntó. Por ahí anda un video del susto que me dio”, dijo.
Los bromistas se esconden dentro del carro de la también empresaria, debajo de muebles, detrás de las plantas, las cortinas y en cuanta cosa encuentren con tal de hacerla pegar casi al techo cuando la asustan. Y, por supuesto, el plan bien elaborado debe incluir a una persona que grabe el preciso momento del sustazo para luego compartirlo en redes sociales.
“No lo veo mal ni me enojo porque lo hacemos en un ambiente de amistad. Todos nos hacemos bromas, nos escondemos cosas, vacilamos con los sobrenombres que tienen y lo que ellos me hacen es parte de esas cosas. Yo lo veo como cuando los hermanillos en la casa lo molestan a uno”, expresó.
A pesar del tanate de veces que la han vacilado, Gamboa se lleva un premio porque nunca ha perdido la dulzura del carácter. Lo más que le ha pasado es que se le ha salido alguna palabrota cuando la sorprenden.
“A ellos se los permito porque son muchos años de trabajar juntos, hay un grado de confianza y familiaridad. Obviamente si alguien que no conozco o en la calle me hace algo que me asuste es muy probable que reaccione diferente”, opinó.
La presentadora, entre risas, dice que ya sus compañeros la tienen tan calculada que saben cuando anda un poco estresada y la sorprenden para que le cambie el humor.
Sin pensarlo mucho ella cantó al que empezó todo y quien se esmera en hacer las mejores bromas: el camarógrafo Víctor Miranda.
“Víctor es el rey, él agarró que yo me asustaba por todo y, además, él ha sido el compañero de mil batallas, son muchos años de trabajar juntos y por eso se ha dado esa complicidad. Un día que estábamos en Colombia junto con Nancy (Dobles), él se metió en el clóset de mi habitación y luego de hablar con Nancy como 30 minutos fui al clóset y ahí me asustó”, recordó entre risas.
Bromas familiares
Gamboa confesó que desde chiquitilla, en su casa, aguantaba situaciones parecidas a las que vive ahora en su trabajo, por eso se toma las vaciladas con un muy buen sentido del humor.
“Mi mamá era la primera en hacerme bromas porque sabía que yo soy muy fácil de asustar, mis hermanos también lo hacían”, dijo.
La guapa recordó que un día su mamá tuvo la paciencia y la malicia para hacerle una broma que a estas alturas de la vida todavía recuerda.
“En la casa había un cactus, ella tuvo la paciencia de ponerle un sombrero, un palo, un sarape (poncho) y colocarlo contra luz. ¡Claro! Cuando yo vi aquello era como un viejo con un rifle en la mano, Imagínese el susto que me llevé”, contó.
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Hasta su esposo Ramón la asusta sin querer.
“Ramón camina muy suavecito y tal vez estoy en la cocina, cuando me doy cuenta ya lo tengo a la par y me pega aquellos sustos. Él me dice que se va aponer unos cascabeles para que cuando camine por la casa sepa por dónde anda y así evitarme los sustos”, contó entre risas.
La facilidad con la que se asusta y el buen humor con el que se toma las bromas, hace pensar que ese vacilón seguirá por mucho tiempo más.