La estrella de Hollywood, Ben Affleck, regresó a rehabilitación para asegurarse de que no vuelve a recaer en el alcohol.
El actor, de 46 años, ha ingresado voluntariamente en el centro porque considera que necesita más tiempo para conseguir mantenerse sobrio por el bien de sus hijos.
Una fuente cercana al protagonista de la película Pearl Harbor explicó que el actor quiere pasar la mayoría de la noches en la clínica The Canyons, en Malibú, donde ha llevado a cabo un tratamiento de 40 días.
"Ben quiere trabajar, estar con sus hijos y centrarse en su recuperación", añade la fuente.
La semana pasada se hacía público que Affleck había completado su divorcio con Jennifer Garner, la madre de sus tres hijos. Precisamente, ella ha sido uno de sus mayores apoyos a lo largo de su tratamiento y quien lo llevó a rehabilitación en su tercer internamiento.
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La pareja se separó en 2015, pero hasta el pasado mes de abril ella no le solicitó el divorcio. La pareja compartirá la custodia legal de sus hijos y tendrá que consultarse entre sí con respecto a todas las decisiones importantes relacionadas con la salud, la educación y el bienestar de los niños.
Por otro lado, se cree que el actor podría haberse distanciado de la modelo de Playboy Shauna Sexton, de 22 años, para poderse concentrar en su salud.
A principios de octubre, el actor habló tras completar una estadía de 40 días en un centro rehabilitación y dijo: “Lluchar contra cualquier adicción es una lucha de por vida y difícil. Debido a eso, uno nunca está realmente dentro o fuera del tratamiento. Es un compromiso a tiempo completo. Estoy luchando por mí y por mi familia".