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Aunque Amanda Moncada nunca ha puesto un pie en la pista de Dancing with the stars, a la señora la han felicitado en varias ocasiones por su “desempeño” en el programa de meneos de Teletica.
Esto porque a la empresaria del mundo de la moda la confunden con su amiga, doña Doris Goldgewitch, quien fue parte del espacio en la tercera temporada.
Pero ahora sí es el turno de Moncada de demostrar que la edad solo es un número y a que a sus 71 años tiene la capacidad para hacer un gran papel en la pista. Ella será la participante de más edad en participar en ese programa.
Doña Amanda, quien es madre de tres hijas y abuela de dos, es una de las 10 concursantes de la quinta temporada de Dancing with the stars. Ahí competirá contra el exdiputado Óscar López; la presentadora Viviana Calderón y su actual pareja el actor y empresario Pablo Rodríguez; el humorista Gustavo Peláez; el cantante Jecsinior Jara; el bailarín de El Chinamo Wesley Vargas; la boxeadora Yokasta Valle; la triatlonista Johanna Solano y la conductora Keyla Sánchez.
La agradable modista comentó que así como lo hizo su amiga en el 2016 (doña Doris tenía 63 años), ella espera llenar de vitalidad y buena vibra la pista, pues se siente más que preparada para dar la pelea al lado de un montón de figuras a las que les lleva, en algunos casos, más de 40 años.
– ¿Cómo se siente al ser una de las figuras escogidas para esta quinta temporada de Dancing?
Muy bien, cuando uno es joven no piensa tanto en lo que vendrá y la vida sigue y nos trae sorpresas como estas, que para mí es un gran reto, pero quiero proyectar buena actitud y deseo de hacer bien las cosas.
– ¿Le costó mucho decir que sí?
Bueno, yo tengo una especie de mánager que es mi hija menor y fue la que me motivó a no dudar mucho. Es obvio que uno al principio siente miedo, pero la verdad es que tengo gran pasión por el baile y siento que es un capítulo que no había cerrado en mi vida. Lo tomo como un reto, porque lleva un gran trabajo aprender a bailar ball room (baile de salón), que es algo que nunca había bailado.
Yo soy más salsera, pero es bonito, yo trabajo con gente joven y creo que todo es asunto de actitud, por eso admiro a Cher y Jane Fonda, que son personas mayores y que tienen gran actitud ante la vida.
- Es la participante de mayor edad en ser parte del programa, tanto en el país como en el extranjero, ¿qué opina de eso?
Yo no lo quiero ver así, lo veo como que soy parte del grupo, si pensaba en mi edad no me metía. De igual manera, como dicen por ahí ‘nadie me quita lo bailao’ y siento que en este momento de mi vida puedo concentrarme más y ser muy positiva, algo que en muchos casos la gente más joven no tiene.
– Su hija Lorena ya participó en Dancing, ¿le ha pedido consejos?
Yo viví el esfuerzo que hizo Lore y si me lo pedían hace un tiempo no hubiera aceptado, pero creo que es un momento bonito. He hablado más que todo con Doris porque ella es la que se me acerca más, me ha dado consejos y me ha motivado mucho. Le cuento que a nosotras muchas veces nos confunden, a mí me han felicitado por lo que hice en la pista, hasta amigas mías me lo han dicho y yo no sé cómo decirles que no soy yo la que bailó hace unos años.
– ¿Por qué cree que las confunden?
Tal vez porque somos de otra generación y porque somos abuelitas del siglo 21, que hacemos cosas y estamos muy activas.
