La actriz porno, Sabrina Sabrok mostró cómo le quedó su frondoso trasero luego de someterse a una cirugía el pasado 18 de diciembre para así tratar de romper el récord Guinness y ser la mujer con las sentaderas más grande del mundo.
La mujer conversó con el diario digital de Argentina Infobae.com en medio de su recuperación y explicó que mandó a hacer los implantes especialmente para ella porque los convencionales “son mucho más chiquitos. Cada implante pesa dos kilos”.
“A mí me encanta operarme y siempre busco hacerme más, me da cierta emoción la anestesia y el hecho de lo extremo, saber que voy a despertarme y voy a estar totalmente cambiada. No siento miedo ya”, dijo la modelo después de su cirugía número 53.
"A estas alturas no me da miedo, me da más miedo un accidente y otra cosa, pero yo me cuido muchísimo, soy muy sana del cuerpo, mentalmente no sé (risas), pero en cuanto al cuerpo, sí. Yo tomo mucha agua, me cuido las comidas, no fumo, no tomo, no me drogo, entonces eso me ha ayudado", reiteró.
La actriz además aseguró que con sus nuevas medidas se siente aún más motivada para hacer más videos para adultos y que a su vez está ansiosa por grabar el video “más perverso de la historia, quiero hacer un video superhardcore (duro)”.
Ella había compartido en noviembre pasado con sus seguidores de redes sociales que deseaba aumentar el tamaño de sus nalgas para que fueran acordes con el enorme tamaño de su senos, que actualmente son talla 38 ZZZ.
Quiere todavía más
Según confesó la modelo, quien ganó fama en México desde el año 2000 cuando bailaba en un programa de comedia de la cadena Televisa, “La hora pico”, su actual pareja la apoya incondicionalmente.
Sabrok dijo estar satisfecha con el resultado pero que sin embargo, puede que más adelante se vuelva a operar de nuevo: “siempre pasa lo mismo cuando uno es adicto a las cirugías, pasa un mes y te empiezas a ver normal porque ya te acostumbras. Al rato voy a querer más, pero tiene que pasar un tiempo para que la piel se estire y haya espacio para un nuevo implante”.
“Siempre quiero más. Me operé los pechos no hace mucho y ahora quiero más, y los labios quiero más todos los días. Sí voy por más, siempre quiero más. No voy a parar. Me encanta esta onda de las cirugías plásticas”, concluyó.
A Sabrina le injertaron implantes de 1.000 centímetros cúbicos en cada glúteo, casi 4 kilogramos en total, y será dentro de un mes cuando sus nalgas se vean con el resultado final mientras se desinflaman.