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Andrea Vargas, una joven oriunda de Puriscal y de apenas 22 años, le dio a Costa Rica su primera medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla, Colombia.
Ella no solo es deportista, también es abogada, está casada con David Jiménez y es madre de Abril Victoria, una princesa de 3 años.
“Es nada más de creer en el trabajo, en el de mi entrenadora, que es también mi madre (Deysiana Mena)”, indicó la oriunda de Santiago de Puriscal.
| Jovencita |
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| 22 años tiene la atleta Andrea Vargas. |
Vargas paró el cronómetro con un tiempo de 12 segundos y 90 centésimas en la competencia de 100 metros con vallas.
"Fue una competencia muy reñida, me preparé duro para poder lograrlo. Sabía que iba a ser muy fuerte, que probablemente no podría tener una medalla, pero es nada más de creer en el trabajo”, señaló Andrea después del carrerón.
La medallista recordó que desde que tenía un añito de edad le gustaba correr en las plazas, algo que su mamá notó, entonces la metió en un grupito en Puriscal.
“Ella me vio talento, hice mi primera competencia en una carrera de la asociación del Banco Nacional para niños y gané el segundo lugar, ya como a los ocho años empecé a dedicarme de manera más profesional”, señaló la puriscaleña, quien está debutando en unos Juegos Centroamericanos y del Caribe.
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La experta en leyes es una defensora del trabajo duro y de la fe que se debe mantener si se quieren alcanzar las metas, tal y como lo consiguió la tarde de este martes, en la caliente tierra colombiana.
Andrea resaltó lo importante que ha sido su mamá en su carrera, no solo por ser su entrenadora, también por ayudarle a cuidar a su hija Abril, a quien la deportista atendía cuando lloraba en plena pista y luego seguía entrenando.
“Ella (la hija) me da salida, me dice: ‘en sus marcas, listos, fuera’, entrena conmigo, le gusta ir al estadio a jugar o me da apoyo”, contó Vargas sobre el comportamiento de su pequeña, quien ahorita está en Costa Rica con el papá.
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La atleta agradeció también a su esposo David Jiménez por el apoyo y él nos contó lo que significó ver por televisión la competencia ganada por su señora.
“Sentí muchísima emoción y alegría. Andrea se esfuerza mucho día con día en todo, tanto en su entrenamiento como su vida en general. Es muy disciplinada y es muy gratificante ver los frutos del trabajo en cada competencia”, explicó Jiménez, quien estaba esperaba a que ella llegara a la Villa Olímpica para conversar por teléfono.
Mamá más que orgullosa
Doña Deysiana Mena, entrenadora y madre de Andrea, habló después de la competencia e indicó sentirse muy emocionada.
“Yo le dije a Andrea que no me importaban los tiempos reportados en inscripción, que yo quería venir por medalla y que ella me iba a ayudar a ganar una medalla”, señaló la feliz mamá.
La entrenadora añadió que el trabajo es en familia y la muchacha solo deja de entrenar un día a la semana.
Mena dijo que se plasmaron los objetivos buscados, añadió que se hizo entrenadora por sus hijas Andrea y Noelia, esta última es marchista y ocupó el noveno lugar en el Mundial de Atletismo sub-20, en los 10 mil metros, en Finlandia.
Desde ya, la feliz mamá anunció que el camino apenas empieza y desean conseguir más medallas para el país.
