En las últimas semanas se ha vuelto común que la Fedefútbol convoque a conferencias de prensa todas las semanas y hasta para temas que no lo requieren.
Por ejemplo, desde que conformaron la famosa Comisión Técnica para elegir al nuevo entrenador, casi que convocan a los medios de prensa todas las semanas, aunque solo sea para decir que no hay plata para pagar un técnico clase A, que tienen 36 currículums en análisis o para que Erick Lonis mencione que no le pareció que el argentino Matías Almeyda revelara que le interesaba venir a dirigir a nuestro país.
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Lo peor es que al técnico de la Mayor lo piensan anunciar hasta octubre, es decir, que si nos basamos en lo que ha pasado hasta ahora, quedan por lo menos unas siete u ocho conferencias más y en ninguna de esas darán a conocer el nombre del elegido.
Está bien que quieran ser claros con la prensa y la afición, pero tampoco convocar por cualquier cosa, especialmente porque el mal papel en Rusia no fue solo responsabilidad del extécnico Óscar Ramírez y los jugadores, sino que la responsabilidad nació desde la dirigencia comandada por el presidente de la Fedefútbol, Rodolfo Villalobos, donde los fallos fueron muchos, incluso en aspectos básicos de protocolo.
Pero claro, de ese tema no se habla y ahora todo se trata de vender con la idea de que se resolverá contratando a un técnico, cuando la cosa no es así.