A los 70 minutos de la visita del Carmelita al estadio Saprissa, Fernando Palomo, una voz muy conocida para todos los jóvenes que juegan la versión en español del video juego FIFA, reportó en la transmisión de la cadena gringa ESPN, el segundo cambio en los verdolagas, salía Suhander Zúñiga por un joven debutante, Brandon Aguilera.
Palomo conocía todos los detalles del chiquillo de 15 años, indicó que jugaba por primera vez en la primera división del fútbol nacional, que era un volante creativo zurdo y que venía de la Academia Wilmer López. solo le faltó contar que el equipo favorito del güila en FIFA es el Real Madrid.
Cuando el partido terminó y Brandon llegó a su casa en Naranjo de Alajuela, un primo le pasó el video del momento en el que el famoso comunicador anunciaba su entrada y el muchacho se sintió en las nubes, la voz oficial de su videojuego favorito narró su debut en el fútbol.
“Mi papás me iban a ver por televisión porque se tuvieron que viajar a Estados Unidos, vieron el partido por ESPN, que el partido lo pasaran por ese canal fue una salvada para que me pudieran ver. Mi mamá me contó que mi papá no hallaba adónde meterse para ver el partido solo porque sentía muchos nervios", explicó Brandon sobre su curioso estreno.
Así como don Bernabé Aguilera y doña Ivannia Espinoza, vieron el partido por esa señal, miles de personas en diversas partes del continente se echaron el show de cómo el muchacho tomaba la pecosa y la servía con confianza a sus compañeros en los 20 minutos más gloriosos que ha sentido en un campo de fútbol.
“Es superdiferente que el nombre tuyo lo mencione un señor que narra partidos de la Champions y de las mejores ligas, fue todo un sueño, es la misma persona que sale en los juegos de FIFA, fue increíble, ese es otro sueño, salir en un juego y poderme usar yo, sería muy chiva”, explicó el chico.
Pulseada
Con solo 7 años, en el 2011 el tata llevó a Brandon a la academia del Pato y poco a poco fue ascendiendo, él es un muchacho que ha ido brincando las etapas con rapidez, actualmente está en la selección nacional sub-17, aunque hace poco estuvo en Austria en un torneo con la sub-15.
Antes de debutar el domingo pasado, el chiquillo ya estaba en el Alto Rendimiento de los verdolagas, en el que ha sido titular durante casi todo el torneo que aún no acaba y donde ha mostrado que los tiros libres son una de sus principales armas, en este campeonato lleva tres goles a balón parado.
En el partido de la primera división ante Guadalupe, en el estadio Colleya Fonseca, en la fecha 20, Brandon estuvo en banca, pero su debut aguardaría a las cámaras de ESPN.
"El profesor (Luis José Herra) me dijo que había una posibilidad, que fuera a entrenar, él vio el esfuerzo y es algo que toma mucho en cuenta, el domingo me dijeron que tenía muchas posibilidades de que entrara, que estuviera tranquilo, todo iba a salir bien.
“Cuando me llamaron para entrar el estadio me impresionó mucho, estaba un poco nervioso, pero los compañeros son muy buenos y me acuerpan, cuando me dijeron que iba a entrar me pasaron muchas cosas por la cabeza, todos los sacrificios y cosas que he pasado para llegar hasta ahí, fue una gran alegría”, indicó el quinceañero.
Bradon todavía tiene cara de chiquillo, pero ya cambió la voz por una más grave y se le nota maduro al hablar en ciertos temas, los papás nos contaron que lo tienen bien ubicado, para que no se vuelva loco ni se agrande y Dios guarde por ahora se le ocurra hacerse un tatuaje o descuidar el cole, donde cursa el noveno año en el Liceo Diurno de Naranjo.
“Creo que los jugadores de bastante edad tienen que ir dando campo y apoyando a los menores, pero también se puede dar el caso, acá no, porque los compañeros son muy buenos y entienden, pero en otros equipos puede que digan, “diay a ese carajillo lo meten de titular o lo convocan y a mí no”, eso puede generar roces que no están bien. Yo sé que todavía no soy nadie, pero tengo muchas ganas e ilusiones de seguir”, indicó.
Para llegar a entrenar a las 7 de la mañana debe salir en bus de 5:30 a.m de su casa, a la vuelta se viene con Bernard Alfaro, compañero en Carmelita que vive en Sarchí y ahí lo recoge su hermano mayor de 19 años.
En su tiempo libre es un chiquillo como cualquier otro, al que le encanta ir a comer olla de carne a la casa de su abuela, vacila cuando gana jugando FIFA en play station, le gusta ver series de superhéroes como Flash en Netflix y hasta tiene chance para Jimena Corrales, “una chiquilla con la que salgo por ahí” nos contó entre risas.