Seis meses después de haber fallado un penal en la Cueva, lo cual le dio el título del torneo de Clausura 2018 a Saprissa, el experimentado delantero mexicano Omar Arellano asegura que está listo para volverse a comer esa bronca y patear uno sin miedo, esto en caso de que sean necesarios estos lanzamientos para definir al finalista del Apertura 2018.
Aquel 20 de mayo, el azteca fue el responsable del cuarto lanzamiento, pero lo mandó a volar, desde ese momento ha esperado un momento como el que se presenta en esta ocasión, la revancha deportiva está en sus manos y no quiere dejarla pasar, por eso el sábado pasado corrió como nunca en la victoria (1-0) del Team en el juego de ida.
“Tenemos la personalidad y el fútbol para hacer las cosas bien. Si nos tocan los penales, todos tenemos la personalidad para volver a tirar, yo también, y creo que hay que pensar hacer un buen partido y evitar los penales”, confesó Arellano, de 31 años de edad, quien llegó a Heredia en enero de este año.
La única manera de que morados y florenses lleguen a los penales sería que el Monstruo gane 1-0. Una victoria florense por cualquier marcador los clasifica, igualmente cualquier empate. Los de casa necesitan imponerse por dos goles de diferencia para avanzar a la final.
“Para mí sería muy importante ganar este campeonato (por encima de Saprissa), nos ha costado, este torneo ha sido muy jodido y en lo personal quedé con esa espinita (por el penal fallado), esperemos que este sea el bueno”, agregó Arellano.
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El mexicano señaló que son lecciones que marcan la vida, pero que le permiten crecer como futbolista. Dice que lo que hace es esforzarse siempre, aunque algunas veces no se den las cosas.
“Demostramos la personalidad, la garra y la entrega, a veces están demás las palabras. A veces hay que poner algo más que fútbol y el sábado fue uno de esos días, Herediano está para pelear este campeonato con esta actitud y esa entrega”, confesó el azteca.
El delantero lamentó que en el primer juego solo pudieron marcar un golcito, aunque sí están tranquilos porque fueron superiores a la "S" los 90 minutos. Ahora tienen, además, la ventaja de que un pepino en Tibás podría marcar la diferencia porque el gol visita vale doble.
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“Se cumplieron los objetivos, ganar y mantener el cero atrás. Hay muchas cosas buenas que se hicieron. En el torneo de Concacaf fue algo muy similar, eramos efectivos en casa y de visita nos costaba un poco, pero ya tenemos la experiencia en eso, tenemos que trabajar en eso”, argumentó.
Para él, la clave para entrar motivados desde el pitazo inicial fue todo lo que sufrieron en las últimas jornadas para meterse en zona de clasificación, les costó mucho como para entrar flojos a esta ronda.