Considerado como “el mejor extranjero de todos los tiempos”, Odir Jacques Ferreira cree que en el cierre de la final de la segunda fase no hay un claro favorito.
Jacques es una voz autorizada pues jugó en los dos cuadros que están disputando la final de la segunda roda. Con ambos ganó títulos tanto como técnico como jugador y es el dedicado del campeonato de Clausura 2019, que arrancará el próximo 13 de enero.
Por eso en La Teja quisimos conversar con él sobre este mejengón del domingo de pronósticos reservados.
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-¿Qué sensación tiene del partido de cierre de este domingo?
La final va a estar muy pareja, sumamente dividida, y aunque Herediano lleva ventaja de un gol, todavía faltan noventa minutos y la verdad lo que espero es que sea un gran juego independientemente del que salga ganador, porque el aficionado tiene derecho a disfrutar, porque el fútbol es amor.
-Usted hace poco le ganó una final a la Liga, ¿cómo hizo para vencer el favoritismo rojinegro?
La verdad es que para ser buen entrenador se deben tener buenos jugadores y cuando Herediano me ofreció esa oportunidad para luchar por el título, me dio una planilla competitiva y salí campeón invicto en el trayecto que me tocó dirigir, además de que le cortamos una racha de cuatro títulos al hilo de Alajuelense, y eso para mí fue importante, sobre todo lo que pudo celebrar la afición herediana con la definición de los penales.
-¿Siente nostalgia cuando el Team llega a otra final?
Claro que sí, porque el fútbol es parte de mi vida, me dio a mi esposa Ana Cecilia, mis hijos Ana Cristina, José Odir y María Cecilia, he vivido grandes alegrías, y pude conocer muchas personas educadas que me ayudaron y eso lo guardo en un lugar muy especial.
-¿Qué le dice la gente cuando lo ve, durante estas etapas del torneo?
De eso vivo muy alegre y agradecido, porque no solo en Herediano y la Liga me quieren, la afición del Saprissa también y por eso cuando se juega el campeonato y la gente me ve en la calle siempre me saluda y por ejemplo en Heredia me dicen que cuándo regreso y a todos les doy las gracias.
¿Cómo toma el hecho de ser designado como el dedicado del Clausura 2019?
Me hace muy feliz porque esta dedicatoria me la hacen estando vivo, por eso lo voy a disfrutar mucho y espero estar vivo para poder entregar el trofeo al campeón.
-¿A quién le gustaría entregarle ese trofeo?
A cualquiera, porque a todos los quiero los mucho.
Un ganador de raza
Odir vino al mundo hace 72 años en Cantagalo, Brasil, en el estado de Río de Janeiro, el 2 de abril de ese año.
El hoy dedicado del Clausura llegó a tiquicia en 1971, procedente del fútbol salvadoreño, donde militó con Sonsonate, Alianza, FAS y Atlético Marte luego de anotar más de 100 goles.
Sus grandes cualidades como goleador nato no tardaron en convencer al técnico del Saprissa en ese momento, Marvin Rodríguez.
Al firmar con el Monstruo empezó una espectacular carrera, la cual se llenó de goles y glorias, con varias chemas, como las de la S, Liga, Team y Limón. En su primer certamen en suelo tico echó 18 veces la pecosa en las redes enemigas. Su punto final como jugador se dio con el cuadro del caribe en el año 1980.
Su cuota goleadora, en algún momento de su carrera, lo tuvo como el extranjero de mayor cantidad de anotaciones, con 82, hasta que fue superado por Josef Miso con 88.
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Pero su historia le tendría guardado un espacio exitoso como director técnico, ya que hoy en día, junto al desaparecido Marvin Rodríguez, son los más ganadores en ese puesto, con seis coronas cada uno, cinco con el Team, el primero de ellos como jugador y como entrenador en 1978, y luego los otros cuatro solo en el banquillo, sumados en 1981, 1985, así como en los Veranos 2012 y 2015. Además fue monarca con la Liga en 1983.
También tuvo la oportunidad de sentarse en el banquillo de la Sele en 1985, y en el Premundial de México 1986.
En Costa Rica su brete como DT lo llevó a San Carlos, Liberia, Cartaginés y Pérez Zeledón.