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La goleada de 4-0 de Alajuelense ante Grecia puede que a algunos no les espante las dudas que sembró el equipo durante la pésima pretemporada eriza; sin embargo hay que reconocer que a la hora de los balazos, en el momento de pelear por los puntos, los liguistas respondieron y en grande con récord incluido para Jonathan McDonald, quien llegó a los 100 goles como rojinegro.
El viernes pasado Luis Diego Arnáez prometió un equipo ofensivo, con dinámica y goles y como si se hubiera dado una vueltita al futuro, el partido que profetizó el Flaco salió tal cual lo dijo, desde el primer momento el cuadro rojinegro salió a presionar a un Grecia sin fuerzas y lo arrolló con un triplete en ofensiva que mostró muy buenas cosas.
Cada parte del plan erizo salió como estaba en el libreto de Arnáez, ¿será que el entrenador tenía razón cuando dijo que la pretemporada es para experimentar lo que hará en el torneo?, al menos por este domingo el técnico demostró tener razón, pero cuidado porque una golondrina no hace verano.
La Liga llegó con hambre, por eso se comió al cuadro de Paté desde el puro arranque, apenas a los cuatro minutos ya tenía el primero adentro en el saco griego.
En la nueva tripleta manuda, Róger Rojas anda por la izquierda, Moya por la derecha y Jonathan McDonald por el centro y en ocasiones se rotan.
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En una de tantas veces que el catracho se metió por la izquieda, la pecosa le quedó servida al Bigmac, quien aunque estaba adelantado ligeramente el gol valió para abrir el marcador.
Como en Tiquicia no hay VAR, nadie reclamó mucho.
Los rojinegros golpeaban una y otra vez el marco griego que tenía poca reacción y argumentos a la ofensiva, el equipo de Paté que jugaba bien no se asomó ni por varas, dejando en evidencia grandísimas diferencias entre ambos equipos.
El griego que tuvo más acción en el partido fue un vendedor de refrescos, quien hizo el agosto aprovechando que la soda del estadio Allen Riggioni estaba cerrada y ante el calor era la única opción para quitarse la sed, ese si ganó bastante y ni cuenta se daba del baño que le estaban metiendo a los dirigidos por Paté.
Para el cierre del primer tiempo, Jonathan Moya se estrenó como goleador con la camiseta eriza, gracias a un cabezazo muy bien dirigido en el área luego de un centro de Alex López al cobrar una falta desde el sector derecho. Moyita le ganó el viaje a los zagueros locales y puso el 2-0 a los 45, tanto que le dedicó a su pequeño hijo Julián.
En el complemento, a los manudos no los fregó la expulsión de Kenner Gutiérrez, roja injusta por cierto, otro caso en el que el VAR hubiera salvado la tanda porque el rojinegro no pateó a Johan Condega, quien vendió la jugada al mejor estilo de Neymar y el árbitro se la compró para echar por acumulación de amarillas al defensor.
Todo le salió a la Liga, en un domingo en el que su principal figura, Jonathan McDonald, escribió otro récord al llegar a los cien goles con la camiseta de la Liga y 116 en la Primera División, casualmente el campo griego le viene muy bien al atacante, porque en esa misma cancha el torneo anterior llegó a la teja de pepinos en Costa Rica.
Para cerrar la fiesta, Moya apareció de nuevo con un golazo. El porteño agarró la pecosa por la izquierda y de un zurdazo se la cruzó al ángulo contrario al arquero Kevin Zamora, quien ni de chiste le llegaba, probablemente sea el gol de la fecha.
A los 91, Grecia hizo el gol de la honrilla por medio de Kenneth Dixon, en lo que es un recordatorio que todas las bondades en ofensiva que tiene la Liga podrían no ser tan útiles si la zaga no anda fina, porque el cuadro de Paté no tuvo argumentos para apretarlos en cambio otros quien sabe, la defensa es otra de las tareas en las que el Flaco también debe demostrar que están preparados.
