Los jugadores de Boca Juniors están hasta la coronilla de todo el ruido sobre el caos que ha rodeado la definición de la Copa Libertadores.

Como lo dijo su delantero Carlos Tevez, es hora de concentrarse en el partido, pero ojo, esto solamente toma en cuenta a los futbolistas porque la parte administrativa del club sigue pensando en las apelaciones.

Incluso este jueves el Tribunal de Apelaciones de la Conmebol rechazó una protesta del cuadro xeneize que pidió los puntos de la final de la Copa Libertadores suspendida por severos incidentes ante su archirrival River Plate, el mes pasado.

El equipo se entrenó el jueves por primera vez en Madrid para el partido de vuelta de la final de la Libertadores contra River Plate, reprogramado para el domingo en el estadio Santiago Bernabéu, a la 1:30 de la tarde (hora costarricense).

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“Es una sensación rara jugar una final de Libertadores en el Bernabéu”, reconoció Tevez al charlar con la prensa.

“Ya cansa hablar de todo lo que pasó. Creo que es importante tener la cabeza bien puesta y tratar de enfocarlo lo más rápido posible. Para nosotros, los jugadores, es raro jugar una final en España. Es difícil enfocarse en un partido", comentó.

Boca y River empataron 2-2 en el partido de ida en la Bombonera, en el estadio de Boca. El duelo de vuelta iba a realizarse en el estadio de River, el estadio Monumental, el 24 de diciembre, pero fue aplazado luego de que hinchas riverplatenses atacaron el bus que llevaba a los jugadores de Boca al partido.

Luego de largas discusiones sobre qué hacer con el encuentro, la Conmebol decidió trasladarlo a Madrid por razones de seguridad.

En una recriminación directa a la Conmebol, el veterano goleador dijo que el organismo no tomó en cuenta a los aficionados y jugadores: “Son tres locos detrás de un escritorio que no entienden nada", afirmó.

Se esperan fuertes medidas de seguridad, dada la preocupación de las autoridades con la posible llegada de hinchas violentos.

Uno de los líderes de la barra brava de Boca no fue autorizado a ingresar al país tras arribar a Madrid y fue enviado de regreso a Argentina, según informaron medios españoles.

Boca busca su séptima Copa Libertadores, lo que le permitiría alcanzar al también argentino Independiente como el club más laureado en la historia del torneo. La última corona continental de Boca fue en la edición de 2007.

River la ha ganado tres veces, la última en 2015. Los dos gigantes argentinos nunca se habían medido en la final.

Boca seguiría apelando

Daniel Angelici, presidente de Boca, había anunciado que no se detendría en el reclamo, que iría al TAS (el Tribunal Arbitral Superior) para continuar su pedido. Claro, que el resultado del partido del domingo seguramente tendrá una gran influencia en la decisión final que tomen en el club.

El fallo decide “desestimar el recurso de apelación presentado por el Club Atlético Boca Juniors en fecha 30 de noviembre de 2018 contra la decisión dictada por el Tribunal de Disciplina de la CONMEBOL, de fecha 29 de noviembre de 2018”, indicó el Tribunal de Apelaciones de la Conmebol.

La resolución se difundió tres días antes de que Boca y River disputen la superfinal.