Pese a que pasaron casi siete años desde aquel domingo 18 de diciembre del 2011, Jafet Soto no olvida ese día.

Es más, lo que ocurrió esa noche es una de las razones por las cuales el exvolante parece tener un resentimiento hacia Alajuelense, equipo al que disfruta mandarle filazos y hasta quitarle jugadores como ya lo hizo llevando al Team a José Guillermo Ortiz, Juan Pablo Vargas y, en los próximos días, es muy probable que anuncie la contratación del lateral rojinegro Orlando Galo.

Ese día, el Team perdió la final ante la Liga en penales 6-5, por lo que Jafet la cataloga como la derrota que más sufrió.

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“La que viví como técnico (en el 2011), cuando validaron como gol una jugada en fuera de lugar (de Marcelo Sarvas), que obligó a tiempos extra y penales). Esa vez no me ganaron como debían ganarme, me ganaron fuera de la cancha”, respondió Soto a La Teja el 2 de octubre del 2016.

Inclusive, hace poco menos de 15 días, en una nota publicada por La Teja, ante la pregunta si fue más doloroso caer 6 a 1 ante los manudos el pasado 9 de setiembre, o aquella final del 2011, Soto volvió a demostrar que no olvida lo que pasó hace casi siete años.

“Es que la final que perdí ante ellos, la perdí porque el árbitro así lo quiso”, contestó el gerente deportivo y entrenador rojiamarillo sobre el trabajo hecho en esa ocasión por el central Jeffrey Solís, acompañado por Marvin Ramírez y Leonel Leal.

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La vida y el fútbol ponen a Soto de nuevo ante la Liga a partir de este domingo, a las 6 de la tarde, y aunque no será para alzar la copa de campeón, sí será para definir al club que se medirá al Saprissa, vencedor de las primeras 22 fechas, para decidir al nuevo monarca del fútbol costarricense.

Sin embargo, mientras las horas corren y se aproxima ese primer juego en el estadio Eladio Rosabal Cordero, es imposible no recordar qué pasó esa noche que Soto sigue con sangre en el ojo.

Polémica arbitral

Alajuelense, dirigido por Óscar Ramírez, era el bicampeón nacional y abrió la final en el estadio Alejandro Morera Soto.

El primer choque acabó con un empate a un gol, con las anotaciones de cabeza de Alejandro Alpízar al minuto 34, y de José Luis Cordero, también de cabeza, al 46´. Ese choque lo arbitró el exréferi Wálter Quesada.

Curiosamente, el partido de vuelta, ese que Soto no logra sacarse de la cabeza, también quedó empatado de nuevo con un gol del Chama Cordero, ahora ficha manuda, quien anotó al minuto 72, mientras que por la Liga lo había hecho Marcelo Sarvas, al 55´.

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Lo anterior obligó a los tiempos extra y después llegaron los penales para que, tal y como le pasó a la Liga esta semana en la serie ante San Carlos, Patrick Pemberton también fue la figura.

En varias ocasiones, Patrick ahogó el grito de gol en el Rosabal Cordero, en remates de larga distancia y en un cabezazo de Jorge Barbosa.

“La salvada más vistosa fue el paradón que le hizo al florense Marvin Angulo, en jugada de tiro libre –en los tiempos extras–. Dicha acción anunció lo que se vendría para el portero más adelante, en la tanda de penales, en donde con frialdad tapó el lanzamiento a Anderson Andrade, lo que le dio vida al equipo manudo para posteriormente dejarse la copa”, reseña la crónica de La Nación de ese día.

En la tanda de penales anotaron para el equipo florense el ahora morado Marvin Angulo, Jorge Barbosa, Pablo Salazar, José Luis Cordero y Diego Madrigal. Pemberton le paró el remate a Andrade, mientras que José Miguel Cubero, hoy ficha de la Liga, fue el responsable de lanzar el séptimo, y lo pegó en el palo derecho.

Del lado de la Liga anotaron Alejandro Alpízar, Kevin Sancho, Juan Gabriel Guzmán, Marcelo Sarvas, Porfirio López y Argenis Fernández, mientras Daniel Cambronero le paró el remate a Elías Palma.

Curiosamente, para esa final se vivió una polémica en los días previos cuando Mario Sotela, presidente del Team, y la dirigencia en general sacaron a la venta, después del primer partido, camisetas celebrando anticipadamente el título 22.

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Las chemas se vendieron como pan caliente pero los fiebres tuvieron que guardarla rapidito ante la victoria rojinegra.

Lo tiene fresquito en la memoria

Marcelo Sarvas recuerda como si hubiera sido ayer ese mentado juego que Jafet no olvida, asegura que en esta ocasión no cree que la serie entre alajuelenses y florenses llegue a los penales porque ambos equipos son muy ofensivos, por lo que cree que todo se definirá en el tiempo regular.

De paso, insistió en que el gol anotado por él no estaba en fuera de juego.

“Recuerdo mucho el entorno, me acuerdo que (Pablo) Gabas estaba lesionado, habíamos empatado uno a uno en el Morera, yo no jugué ese primer partido porque estaba sancionado de la semifinal y luego del uno a uno salió mucho en la prensa que Herediano estaba celebrado el torneo, habían hecho las camisetas de campeón”, indicó el volante.

Sarvas dice que, además de Gabas, había otros jugadores importantes fuera, de los cuales no recuerda el nombre, por lo que Alajuelense llegó al Rosabal con un ambiente en contra, sin embargo, hicieron un gran juego.

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"He escuchado a muchas personas decir que mi gol estaba en fuera de juego y no estaba, son interpretaciones.

“Recuerdo que Tuto (Kevin Sancho) tenía la bola, yo hice un recorrido por la izquierda y él iba driblando por la derecha la pelota, la cual vino en dirección mía y anoté, creo que por eso el árbitro y el línea interpretan bien que no estaba en fuera de juego”, recordó el exmanudo.

El sudamericano añadió que esas finales entre rojinegros y rojiamarillos eran muy buenas y que Jafet hacía un gran trabajo con el Team.

Viendo la serie que inicia este domingo, Sarvas contó que Herediano es un equipo que viene de menos a más y eso siempre es un factor importante en este tipo de partidos.

“(Herediano) Casi no clasifica y lo hizo de cuarto, le ganó a Saprissa, que fue el mejor equipo de la fase regular, y ahora está muy motivado”, señaló.

En cuanto a su querida Liga, Marcelo considera que tiene un excelente equipo, especialmente de media cancha hacia adelante, siempre anota y es peligroso, aunque tiene sus debilidades.

Para él, la Liga pasó contra San Carlos pero sufrió mucho y eso debe servirles de lección para no cometer los mismos errores contra el Herediano, un club que, a diferencia de los norteños, no perdona en el área y anotan.

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Sarvas terminó la entrevista recordando que los manudos, al tener casi cinco años sin ser campeones, están pasando por una racha de motivación y eso es un punto a favor, además del apoyo de la afición y el hecho de cerrar en casa contra los florenses.