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Un antiguo entrenador de porteros, mentor del internacional brasileño Alisson, actual portero más caro del mundo, confesó este martes al periódico The Sun que convenció a sus padres de que el arquero no colgase los guantes.
El meta de 25 años, fichado por el Liverpool por un traspaso récord de 75 millones de euros procedente de la Roma, tenía un ligero sobrepeso por malos hábitos alimenticios y sus padres preferían que dejase el fútbol y se dedicase a los estudios.
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"Un día sus padres vinieron a buscarme pensando que él no tenía futuro en la profesión y querían sacarlo del fútbol", contó su mentor Daniel Pavan a The Sun.
"Pensaban que tendría más futuro en los estudios", añadió.
Pavan recordó que trabajó para convencerles de que Alisson iba aún a crecer más y tendría un gran futuro como arquero.
El mentor afirmó que tranquilizó a los padres sobre la escasa estatura de Alisson en aquel entonces. Hoy en día el arquero mide 1,93 metros.
"Cuando Alisson comenzó tenía una maduración más lenta que los demás chicos, eso le hacía ser más bajo y con más peso que el resto", indicó Pavan, que reconoció que no gozaba de la condición de titular.
Pero “gracias a Dios ellos (sus padres) me escucharon. Un año después creció 16,51 centímetros”.
