N’Golo Kanté no ha perdido su humildad, ni siquiera después de ganar la Copa del Mundo en Rusia con Francia.
Más bien ahora se hizo viral una situación insólita en la que fue protagonista: perdió un tren y terminó pasando la noche con un grupo de aficionados extraños e, incluso, mirando el partido que había jugado un rato antes.
Kanté saltó a la fama en la temporada 2015-2016, cuando la rompió en el Leicester City, campeón de la Premier inglesa ese año. Su gran nivel, decisivo para el histórico título, le abrió las puertas de la selección de Francia y también del Chelsea, equipo que lo compró a cambio de 32 millones de libras (unos ¢24 mil millones) tras aquel logro.
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A mediados de este año consiguió lo máximo para un futbolista, ganar el Mundial.
Según revelaron en Twitter, el hermano menor de uno de los desconocidos fanáticos lo encontró en una mezquita (lugar de culto para los seguidores de la fe islámica), luego de perder un tren rumbo a París y lo invitó a cenar a su casa. Kanté aceptó y, una vez llegado, se fotografió con los chicos.
Pero eso no fue todo... Además cenó con ellos, miró un resumen del encuentro del Chelsea que había jugado un rato antes (4-1 ante Cardiff City) y hasta jugó unos partidos de FIFA en play.
“Campeón del mundo, antiguamente elegido como jugador del año de la Premier League y campeón dos veces de la Premier, se unió para ver MOTD (Match of the day, un programa que muestra resúmenes de los partidos de la fecha) después de visitar una mezquita local. Verdadera definición de la humildad. Qué hombre...”, escribió el usuario jahrul999.
A su vez, el usuario abz_gooner agregó: “Todo empezó con Kanté perdiendo su Eurostar (tren) a París, luego buscando una mezquita local y más tarde lo tienes comienzo arroz al curry, jugando al FIFA y mirándose a él mismo en MOTD”.