Este martes luego de la conferencia de prensa donde se dieron los detalles de la edición 19 de los 90 Minutos por la Vida, el pequeño Anthony Monsalve Agüero de 11 años terminó agotado y no por la leucemia con la que lucha valientemente desde hace siete meses.

“Es que contando a usted ya he dado seis entrevistas hoy, pero no importa, yo lo atiendo, viera que esto me gusta mucho”, nos dijo el pequeño oriundo de Jacó que se robó el show este martes en la sede de la Asociación Lucha contra el Cáncer Infantil (ALCCI).

Bajo los ojos de Anthony el mensaje central de lo que trata una actividad como esta queda clarísimo, meterle un hombrito a niños que todo lo que piden es una oportunidad de vida para seguir riendo, jugando, estudiando como cualquier otro.

A algunos como Anthony los ilusiona el sueño de ser futbolista en un futuro, por lo que desde ya se está preparando para las cámaras, dar entrevistas y hasta sentarse en una mesa en una conferencia de prensa como lo hizo este martes al lado de futbolistas como Jonathan Moya, Rándall Azofeifa, Jeikel Medina y Néstor Monge.

“A mí una vez me entrevistaron con Scotiabank y Radio Columbia y ese día tenía bastante miedo, pero ahora se me hizo un poco normal y me empezó a gustar un poco. Hoy fue la primera vez que estuve en cámaras en tele y lo tomé normal, ahí me voy preparando", nos contó con mucha soltura para pasar a otras dos entrevistas.

El espíritu, las ganas de vivir y hasta la madurez de Anthony a su corta edad motivó mucho a los futbolistas cuando lo escucharon con micrófono en mano dando un mensaje de optimismo.

“Yo le pido a todos que por favor ninguno falte porque esto no se trata de colores ni equipos, esto tiene a niños detrás que estamos luchando contra una enfermedad muy grave y queremos una oportunidad”, destacó Anthony.

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Muy cotizado

A pesar que Monsalve confesó que es seguidor del Herediano, el volante morado Jeikel Medina no dudo un momento para decir que le gustaría llevárselo como motivador al Saprissa por su positiva forma de ver la vida y hasta ideó un plan para que se haga saprissista.

“Quién sabe, tal vez si ganamos la 35 puede ser una buena técnica”, destacó Medina para convencer a Anthony, pero Azofeifa apelaba al corazón del chiquillo para que no se vuelque de acera como dijo cuando lo tenía al lado, “no, no, él es herediano, no inventen”.

En el caso de Moya y Monge se reflejaron en el carácter que tiene el pequeño para salir adelante, el cual representa a miles de niños y sus familias que pelean contra el cáncer con la gran ayuda de la ALCCI y eventos como los 90 minutos por la vida.

“Hay que tomarse el tiempo para venir y ver lo que pasa detrás de estas paredes y las historias de lucha de los niños, los que somos padres nos pone a pensar en lo afortunados que somos, son un ejemplo para todos”, indicó Moya.

Monge hasta recordó cuando veía este tipo de torneos por televisión en sus inicios y también se apuntó a llevarse a Monsalve al Cartaginés para que les dé una manita.

“Ahora que escuchaba a Anthony hablar le dije que si tiene un sueño que la pelee, que le dé con todo, yo era uno de esos que quería ser futbolista, gracias a Dios no pasé por lo que él atraviesa, pero escucharlo hablar con esa propiedad y esas ganas de cumplir sus metas y sueños le llena a uno el alma”, dijo el brumoso.

El 6 de enero en el Estadio Nacional a partir de las 4 p.m los cuatro clubes más importantes del país se darán cita para un partido en el que los colores quedan de lado y lo importante es ayudar a dar un poco más de vida y cumplir sueños como los de Anthony.