EscucharEl arbitraje tico vive uno de sus peores momentos, en la última fecha prácticamente hubo errores en todos los estadios, no hubo cara en que persignarse, esto a pesar de los 615 días que lleva Carlos Batres como coordinador arbitral de la Federación Costarricense de Fútbol.
Son 20 meses en los que no ha podido arreglar el arbitraje tico, que más bien parece ir como el cangrejo.
El guatemalteco fue presentado el 22 de febrero del 2017 y todo pintaba muy bonito, aunque parecía una decisión extraña porque se invierte extraoficialmente cerca de ¢2 millones en su salario por alguien que tampoco garantizaba soluciones.
El día de su presentación ante los medios de comunicación dijo: “Yo tengo que demostrar de aquí a diciembre mi trabajo, después lo van a juzgar y sabrán si hay que darle el seguimiento que corresponde y podemos tener uno o dos años más, lo que sea posible. Tengo que buscar la forma de integrar más árbitros y cómo los capacitamos mejor”.
Ya han pasado diez meses desde diciembre y cada domingo los árbitros lo dejan muy mal parado.
También señaló que: “El problema del arbitraje es que el árbitro no sabe ubicarse en el terreno y por la mala ubicación no puede ver las partes, estamos trabajando con los asistentes para que cuando el árbitro no ve la falta, si el asistente la vio, también se comprometa y ayude al árbitro", algo que sigue sin resolverse después de tanto tiempo.
LEA MÁS: Fedefútbol ratifica sanción por dopaje a José Andrés Salvatierra
El día de la presentación aseguró que ya había trabajado algunas cosas con los jueces ticos.
“Ya practicamos posiciones en tiros libres, situaciones estáticas, posiciones en movimiento dentro del terreno de juego, vimos algunas deficiencias, como que algunos árbitros miran al suelo en lugar de estar viendo al asistente, siempre hay que levantar la vista. Hay muchos factores que podemos analizar para a corto plazo evitar eso”, dijo hace 615 días, perola cosa sigue igual.
Batres fue un reconocido arbitro de la Concacaf, contra la Sele no cometió graves errores, quizá uno recordado es un penal que le cometió Rafael Márquez a Paulo César Wanchope en el estadio Ricardo Saprissa y que él no sancionó. Los aztecas iban ganando 2-1 en febrero del 2005 y se hizo de la vista gorda.
Pero fuera de ese detalle da la impresión que no hay nada más que recriminarle, aunque ahora parece haber caído en un hueco profundo en la Fedefútbol, donde no basta su experiencia.
“Yo creo que Carlos Batres no fue un árbitro excepcional, lo que pasó fue que estuvo apadrinado como muchos en la Concacaf y cuando dirigió partidos de Costa Rica tuvo las equivocaciones normales, no creo que haya perjudicado adrede a nuestra selección o equipos costarricenses, en cuanto a su labor actual creo que trata de hacer un buen trabajo, no creo que sea el culpable”, comentó el experimentado periodista de Radio Columbia, Leonardo Cordero.
LEA MÁS: Vladimir Quesada defendió el arbitraje en Limón pero cree que el público grita por todo
“No se cuenta con buenos árbitros en estos momentos, creo que hay más culpables y escucho que él es el más señalado por lo que se da jornada a jornada, pero también está la Comisión, los dirigentes del arbitraje, además, los pésimos analistas que hay en este país que no buscan soluciones sino solo critican y los dirigentes fanáticos de los equipos que ejercen gran presión a los árbitros y llegan prejuiciados a los partidos”, agregó.
Para Leo y también Cristian Sandoval, periodista y estadígrafo de Teletica Radio, las condiciones en Tiquicia no dan para que con solo Batres se pueda salir adelante.
“Me parece que Carlos Batres no fue un mal árbitro, fue uno de los más reconocidos y con mayor estabilidad en la Concacaf, creo que a él no le fue mal con nosotros, no fue como Joel Aguilar Chicas, fue un silbatero de regular para arriba.
"El problema de la Comisión no es un problema de Batres o de Ricardo Cerdas, creo que es un problema que va más hacia adentro, la exigencia que hay para los árbitros no sé si es la más adecuada o efectiva, hay árbitros que se equivocan una vez sí y la otra también y uno no siente que haya condición de sanción o corrección inmediata”, explicó Sandoval.
“El problema de Batres es que tampoco le ha metido mucha mano al arbitraje, no sé si está tan atado de manos a la hora de tomar decisiones, creo que Ricardo Cerdas ha sido muy deficiente en su condición como presidente de la Comisión, me causa cierta gracia porque Ricardo era siempre uno de los árbitros que más criticaba a las comisiones y resulta que cayó en lo mismo", agregó el estadígrafo.
