Un adulto mayor no podía ni dormir de la emoción al saber que iba para el Tope Nacional y cumplió un gran sueño que atesorará por siempre.
Él es José Francisco Morales Campos, un vecino de Alajuela, que llegó acompañado por sus hijas María y Yorleny y de su pequeño nieto Enzo, de tan solo 11 meses.
Don José ama los caballos y nos contó que nunca había tenido la oportunidad de participar en esta actividad, por lo que estaba muy agradecido con su hija María por llevarlo y permitirle ser parte de este evento.
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El Tope Nacional reúne a grandes y pequeños para disfrutar de los caballos y de todas las actividades que forman parte de esta tradición, que por primera vez se celebró en San Pedro y no en el centro de la capital, como en años anteriores.
“Para mí es una gran felicidad porque nunca había venido. Mi parte favorita es ver los caballos caminando, trotando y todo. Hoy yo me levanté a las 5 a.m.”, nos dijo don José Francisco, quien llegó bien abrigado y preparado con todo para disfrutar al máximo.