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Para nadie es un secreto que existe una gran rivalidad entre los dos equipos más grandes de Argentina: Boca Juniors y River Plate, pero ¿qué tienen en común estos dos conjuntos?
La enemistad inició desde el siglo pasado y lo más curioso de todo es que ambos surgieron en el barrio La Boca y no hay un dato que indique cuándo iniciaron sus diferencias.
El primer clásico lo ganó Boca en 1908 y River pudo vencerlos hasta en 1913. La eterna disputa se ha dado por el poderío de los dos y por distintas polémicas en su historia. Aunque sus diferencias van más allá de lo deportivo, por ejemplo se dice que Boca es el equipo de los trabajadores, mientras que River es el de los empresarios, por eso les dicen los “millonarios”.
El pasado 21 de abril los dos cuadros se vieron las caras en el estadio Mario Alberto Kempes, en el centro de Córdoba, ciudad de Argentina, para disputar los cuartos de final de la Copa de la Liga. Ese encuentro fue histórico porque ambas aficiones estuvieron presentes en el estadio después de mucho tiempo sin poder hacerlo, debido a la gran violencia que se vive en el país che con el tema de las barras bravas.
Ese día La Teja estuvo presente en el barrio de Buenos Aires y fuimos testigos del ambientazos que se vivía, a pesar de que el partido era a cientos de kilómetros.
La última vez que ambos hinchas habían estado juntos fue en la Copa Libertadores el 9 de diciembre del año 2018, donde River se impuso en un marcador de 3-1 sobre Boca Juniors. En esta ocasión, el escenario fue el estadio Santiago Bernabéu, España.
Como ambos clubes tuvieron sus inicios en La Boca, nos pareció un buen lugar para compartir con su gente y a la vez conocer el estadio Alberto J. Armando, más conocido como La Bombonera.
Antes de dirigirse al estadio, uno puede recorrer el famoso Caminito, una calle que es muy frecuentada por turistas y con un gran valor cultural.
Desde ahí ya se vivía un buen ambiente y las familias andaban bien identificadas. Los restaurantes de la zona aprovechaban para invitar a todos a ver el partido desde sus locales. Había agrupaciones de personas con música alta en las calles, cantando himnos y aplaudiendo, en general se vivía una completa fiesta.
Después de este trayecto, me dirigí al estadio, aunque solo se puede observar desde afuera, debido a que en pandemia se limitó el acceso y únicamente pueden ingresar socios.
El Museo de la Pasión Boquense sí es abierto al público y se encuentra junto al estadio. El valor de la entrada es de 13 mil pesos argentinos, unos 14 dólares (7 mil colones aproximadamente), precio para extranjeros. Una de las reglas es no vestir camisetas de ningún otro club argentino, por respeto.
El museo tiene un gran valor histórico y se pueden encontrar camisetas, un espacio dedicado a Diego Armando Maradona, fotografías de jugadores que han dejado huella, trofeos y grabaciones.
Las calles cercanas a La Bombonera están con murales de graffiti y había ventas de choripán, camisas de Boca Juniors y de Argentina, sombreros, bolsos, gorras y mucho más. En el Caminito la fiesta futbolera seguía en pie.
El partido pude disfrutarlo en un restaurante llamado Parrilla la Ribera Caminito, con muchos hinchas de Boca que disfrutaron el partido al máximo; por un momento estuvieron en aprietos porque River parecía tener el control.
Todos estaban que se comían las uñas y más aún con el gol tempranero al minuto 10 por Miguel Borja, de River Plate. Miguel Merentiel trajo alegría a sus aficionados boquenses con un gol al minuto 46 del primer tiempo y eso fue suficiente para emocionar a los hinchas.
El gol fue celebrado con gritos, abrazos y hasta un vaso salió quebrado por la emoción. Al minuto 62 Edinson Cavani alegró a los apasionados de Boca con un gol más, el cual provocó un nuevo festejo que hasta los cocineros salían a celebrar.
Al minuto 67, Miguel Merentiel produjo alegría a los boquenses y Paulo Díaz, de River Plate cerró el marcador con un gol para su equipo al minuto 97. Finalmente el partido quedó 3-2 a favor de Boca y con esta victoria clasificaron a la semifinal de la Copa de la Liga argentina.
En semifinales Boca Juniors fue eliminado por Estudiantes después de empatar con un marcador de 1-1 y perder en penales.
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Definitivamente fue una experiencia inolvidable en este barrio que demuestra lo que es la pasión, el amor al fútbol y la conservación de sus costumbres y tradiciones.
