Gamers, ¿a cuántos de ustedes no les han dicho que los videojuegos los ponen violentos? ¿Cuántas mamás no pasaron las horas pegando alaridos diciendo que “la nintendo” era del diablo?
Por años, muchos --incluidos presidentes y gobernadores-- han utilizado el estereotipo de que los videojuegos ponen violentas a las personas, para intentar regular o restringir este mercado y en el peor de los casos, para echarle la culpa de otras desgracias.
Claro que cuando vemos la violencia que hay hoy en día en las calles o vemos en televisión los tiroteos masivos en Estados Unidos, puede ser muy fácil creerse el cuento de que es culpa de los videojuegos, pero, ¿es cierto?
La ciencia habló
Acá hay que entender que este no es un tema reciente, pero en los últimos años se han realizado estudios para llegar al fondo de este misterio y para decepción de más de una mamá, la respuesta es... ¡no!
Por el momento, no se ha encontrado ninguna relación directa entre los videojuegos y la violencia.
Como en todo, hay estudios a favor y otros en contra, pero la mayoría aseguran que no se puede generalizar el comportamiento violento y echarle la culpa a los videojuegos.
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Por ejemplo, en 2021 el Oxford Internet Institute publicó un estudio en el que concluye que no solo no existe relación entre jugar videojuegos violentos y las conductas agresivas, sino que puede llegar a resultar beneficioso.
Algo similar dice un estudio de la academia científica Royal Society y otro de la Universidad de York, en los que más bien aseguran que es todo lo contrario y que los videojuegos pueden ayudar en temas como el aprendizaje, el razonamiento lógico y el discernimiento.
De hecho, en un artículo para el New York Times, la doctora e investigadora Cheryl Olson, admite que sí, algunos juegos son sumamente violentos, pero que los niños y adolescentes generan la capacidad de discernir ese tipo de violencia en la vida real.
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Ahora, en el otro lado de la moneda, un estudio publicado en la Revista de Personalidad y Psicología Social, dice que estar expuestos constantemente a esta violencia digital puede desensibilizar a las personas y facilitar respuestas agresivas en situaciones reales.
Pero acá hay que dejar algo claro, la mayoría de estudios concuerdan en que hay factores externos, que no son el videojuego como tal, que podrían llegar a influir en el estado de ánimo de las personas.
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Por ejemplo, si están jugando FIFA con sus amigos, los están goleando y comienzan a burlarse, la respuesta natural de más de uno sería ponerse a la defensiva y reaccionar de manera violenta. O si llevan horas jugando y están a punto de ganar un nivel muy difícil y se va la luz, claramente se van a enojar.
Así que depende mucho del contexto y de los factores externos, pero en términos generales no se ha comprobado que los videojuegos pongan violentas a las personas.