Esteban Alvarado experimentó emociones encontradas, tras lucirse con Saprissa en el clásico nacional ante Alajuelense.
El portero morado fue clave con intervenciones que le permitieron al Monstruo terminar 1 por 1 y sumar un punto en el Alejandro Morera Soto.
“Alajuela es un equipazo, venir acá es muy complejo, muy complicado, pero somos Saprissa y demostramos carácter. Incluso, en algunos momentos del partido tuvimos que hacer bloque defensivo, se logró y es válido. Felicito a los muchachos, porque aguantar una presión de estas no es fácil. Nos vamos con un sabor agridulce, sentimos más que perdimos tres puntos, pero hay que sacar lo positivo”.
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Alvarado contó emocionado que disfruta todos sus partidos por igual, porque adelantó que pueden ser los últimos.
“Para mí todos los partidos son muy especiales, máxime que... veo que pueden ser mis últimas temporadas y las estoy disfrutando al máximo con el equipo que quiero de verdad, que es Saprissa. Hay que seguir trabajando, yo tengo mucho que mejorar, uno tiene que ser humilde, yo voy partido a partido”, dijo emocionado.
Para el guardameta fue fundamental que, a pesar de que el club no cuenta con todas sus figuras por lesiones, los que estuvieron jugaron con lo que se necesitaba para no perder.
“Resalto la actitud de los compañeros porque jugamos con riñones. Alajuela tuvo bloques de 20 o 15 minutos donde nos tenía, pero el bloque defensivo estuvo muy bien planteado, es estrategia”.
Alvarado sabe que se lució y no solo con tapadones, tanto así que hasta hizo las de Dibu Martínez y sacó los pasos prohibidos en pleno partido.
“La vida es una, hay que disfrutar, esto es un carnaval, como dice Celia (Cruz)”, concluyó entre risas.