La violencia que se vive en nuestro país por los homicidios cometidos por sicarios que viajan en motocicletas es muy similar a la que ocurría en Colombia hace más de 30 años por el actuar de los carteles del narco.
Esa es la percepción que tiene Michael Soto Rojas, jefe de Planes y Operaciones del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), sobre la situación que enfrenta el país, donde muy a menudo ocurren asesinatos protagonizados por gatilleros en moto.
“En este momento, Costa Rica está viviendo un fenómeno similar al que ocurrió en Colombia a finales de los ochentas y principios de los noventas, con todo el tema del sicariato asociado al tema de las motocicletas.
“Ya no es el sicario extranjero el que viene a ejecutar, ahora es el sicario nacional, muchas veces torpe, aunque a veces vemos un nivel de profesionalismo”, dijo Soto en el programa de radio “OIJ a tu servicio”.
LEA MÁS: Mortal balacera en Guápiles acabó con la vida de un recolector de basura
Uno de los hechos más recientes ocurrió el pasado lunes 22 de agosto, cuando dos sujetos en motocicleta acabaron a balazos con la vida de Allan Pérez Alcázar, de 34 años, quien trabajaba como recolector de basura en la Municipalidad de Pococí.
Algunas diferencia
Si bien cree que las situaciones entre ambos países son similares, Soto explicó que hay diferencias muy marcadas, por ejemplo, en Colombia el sicario en moto tenía que ver más con cuestiones sociopolíticas.
“Recordemos que había un problema social importante asociado a grupos paramilitares o de izquierda, como la Farc, que generaban otras situaciones de violencia. Todo aquel conflicto que se generó en los ochentas con el cartel de Medellín y el de Cali es muy distinto a nuestra realidad”, detalló.
LEA MÁS: Cámara captó a gatilleros que ejecutaron a pareja dentro de carro (video)
Sin embargo, Soto señaló que la violencia callejera desde el sicariato que se está viendo en el país, sí es muy similar a la que vivió ese país sudamericano en aquel entonces, donde los gatilleros en moto eran el medio predilecto para atacar a los rivales.
“Podríamos decir que estamos llegando o que estamos en ese nivel, con las distancias del caso, por las circunstancias diferentes de cada país”.