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Los restos del viejito Luis Ángel Vargas Ocampo, de 65 años, y de su sobrino político Joseph Altamirano Delgado, de 12 años, quedarán uno al lado del otro.
Los vecinos de Osa despidieron este lunes a “Copete Blanco” , como le decían a don Luis, y este martes tienen pensado enterraran al menor.
Los familiares de los fallecidos prefirieron que los nichos quedaran uno al lado del otro en el cementerio de Olla Cero, en Osa.
Ambos perdieron la vida en un accidente de tránsito ocurrido el sábado pasado mientras caminaban a la orilla de la carretera Interamericana Sur, cerca de la entrada de la comunidad La Puerta del Sol.
Luis Antonio Vargas, hijo de Luis Ángel, caminaba junto a ellos al momento del atropello e intentó salvar a su papá y al menor, pero a pesar de que intentó jalarlos de las camisas no fue suficiente para evitar que sufrieran golpes mortales. De acuerdo con las autoridades el hombre que manejaba el carro se quedó dormido.
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Los vecinos recordaron al viejito como una persona trabajadora y buena gente. Él murió el día del accidente.
Mientras que al niño lo definieron como un escolar muy activo y con deseos de superación. El adolescente perdió la lucha por la vida este domingo cuando los médicos del hospital Tomas Casas de Osa trataban de estabilizarlo.
