La cara que tenía Samady Fonseca, conocida como la “Barbie”, en el último día del juicio por el homicidio de Gerardo Cruz lo decía todo: ya había perdido la esperanza de salir libre de esa sala. Por eso al escuchar la condena en su contra ni siquiera pestañeó.
Tras una espera de casi tres años, este martes se cerró el último capítulo del caso del joven panadero en una pequeña sala de los tribunales de Pavas que estaba abarrotada por familiares de Gerardo. Ellos llevaban puesta una camisa con su foto y una leyenda en la espalda que decía: “Gracias, Costa Rica, por todo el apoyo brindado a Gerardo”.
El encargado de dar a conocer el final de esta historia fue el juez Leonel Pereira, quien sin darle muchas vueltas al asunto leyó la sentencia dando a conocer que la “Barbie” tendrá que pasar los próximos 30 años guardada.
En el caso de la hija de Fonseca, María Kristina Valerín Fonseca (de 20 años), el tribunal la sentenció a 25 años de prisión y la misma condena le recetaron a Ronald Arce Barrientos y a César Chaves Cerdas (de 22 y 24 años de edad respectivamente), los intermediarios entre las mujeres y los sujetos que atacaron a Cruz.
Tras escuchar la condena todo mundo puso los ojos sobre Samady para ver qué cara iba a poner. La sorpresa fue que la mujer se quedo rígida.
Su hija únicamente puso la mano derecha sobre su frente, como sosteniendo su cabeza, pero en cuestión de segundos copió la misma cara inexpresiva de su mamá.
La que sé reaccionó ante la sentencia fue doña Patricia Barquero, mamá de Gerardo, quien no pudo contener las lágrimas y de una vez se abrazó con su esposo, Hermes Rodríguez, y su hija, Milena Rodríguez, quienes estaban en la primera fila.
Los jueces explicaron que, tras analizar todas las pruebas, no tenían ni la menor duda de que fueron las mujeres quienes planearon el homicidio, por lo que pidieron ayuda a Arce y a Barrientos para contratar a los dos sujetos que atacaron a Gerardo.
Cabe recordar que las autoridades solo pudieron detener a uno de los dos atacantes, un menor de 16 años que anteriormente decidió declararse culpable por el homicidio.
Cuando el juicio terminó los custodios del OIJ sacaron a todos los condenados de la sala, Fonseca caminaba con la mirada fija, como si estuviera en otro mundo, mientras que su hija volvió a ver a las cámaras para echarse una sonrisa burlona.
Justicia cumplió
Entre lágrimas, doña Patricia Barquero dijo que este martes finalmente encontró un poco de la paz que había perdido con la muerte de su hijo. Explicó que oir la condena en contra de Fonseca y la hija de esta le devolvió la fe en la justicia.
“Le doy gracias a Costa Rica, a toda la gente que siempre estuvo en oración por mi hijo. De verdad que Dios tenía un propósito con él, se hizo su voluntad y ya desde hace dos años está con él. Sé que ya no lo vamos a tener con nosotros, pero se hizo justicia, yo creo que aquí todavía hay leyes y hay que apoyar a esta gente que luchó día y noche por recabar pruebas. Les agradezco de corazón”, dijo.
Karol Zúñiga, novia de Gerardo, dijo que la ausencia de quien fue el amor de su vida aún le duele muchísimo, pero aseguró que esta decisión de los jueces le traerá mucha paz.
“Me siento muy agradecida con Dios porque se hizo justicia, se condenó a las personas que realmente se tenía que condenar. Ya puedo estar tranquila y aunque mi hija no tiene al papá al lado por lo menos él ya está tranquilo, puede descansar en paz”, añadió.
El ataque en contra de Cruz sucedió la noche del 7 de octubre del 2015 en las inmediaciones del parque Kennedy, en San Sebastián. Producto de las heridas de puñal falleció el 19 de noviembre de ese año en el hospital Calderón Guardia.
Antes de su asesinato, Gerardo Cruz se dio a conocer al denunciar por medio de un video a un hombre que, presuntamente, grababa a una muchacha con su celular por debajo del vestido mientras ella caminaba por el bulevar de la avenida Central de San José.