El nuevo fiscal general de la República, Carlo Díaz Sánchez, tiene marcadas cuatro direcciones que lo llevan a un solo punto: fortalecer el Ministerio Público y aumentar la credibilidad de los ciudadanos en este órgano.

Díaz sostiene que el aumento de la violencia en Costa Rica, desde el 2022 a la fecha, se debe a las luchas de poder entre bandas criminales. Pero asegura que muchas de estas organizaciones ya están identificadas y las tienen dentro de sus objetivos de persecución, como parte del primer horizonte en el que trabaja.

“Hemos unido fuerzas con el OIJ, el Ministerio de Seguridad Pública, con la Policía de Control de Drogas y la Policía Profesional de Migración para fijar objetivos de persecución, tenemos identificadas algunas estructuras criminales y en esas nos vamos a enfocar, el sentido de investigación va a ser diferente”.

Afirmó que, durante estos meses de gestión, ha detectado un mínimo de tres estructuras criminales grandes por provincia, las cuales son las responsables de cometer balaceras y, muchas veces, matar a inocentes.

“Cualquier muerte es lamentable, pero es más lamentable cuando son víctimas colaterales (inocentes) de estos hechos. La manera (de frenar eso) es atacando a estos grupos criminales, es la única manera y así está enfocado nuestro ataque al crimen organizado”, señaló.

Sostuvo que la lucha no es solo contra los narcos nacionales, sino también con los internacionales.

“Esta actividad delictiva (narcotráfico internacional) ya no paga con dinero, sino que con la misma droga que queda en el país, que tiene que ser vendida y esto genera la lucha entre los mismos grupos organizados”, detalló.

Desempolvar expedientes

Como su segunda línea fuerte para trabajar, es darle apoyo a todas las fiscalías territoriales (las que están en las provincias), las cuales tienen acumulación de expedientes.

Pretende descongestionar y así liberar el trabajo para los fiscales, ya que la mayoría tiene hasta 250 expedientes cada uno, lo que lleva a hacer el proceso más lento.

Díaz considera que está situación no es una deficiencia en el Ministerio Público, sino que se debe a la falta de recursos, porque cada fiscal a veces tiene una carga bastante alta ante la acumulación de expedientes penales.

“Es un tema preocupante porque hemos visto que esas altas cargas de trabajo no nos permiten realizar una justicia pronta y cumplida”, explicó.

Conta cuellos blancos

Como tercer línea de trabajo, el fiscal general luchará contra la corrupción y delitos que afectan la transparencia en el país, estos son los conocidos ‘delitos de cuello blanco’, los cuales cometen personas con rangos altos.

“Hay una fiscalía que se dedica a eso y la estamos fortaleciendo y supervisando para que estas causas, que son bastantes voluminosas y que consumen mucho trabajo, las podamos atender de manera más pronta”.

Finalmente, se enfocarán también en las fiscalías que ven a las poblaciones vulnerables como la de Violencia de Género, Asuntos indígenas, Delitos Ambientales, la de Ejecución de la Pena, entre otras.

Díaz le dice a la ciudadanía que esperen de él un profesional honesto y quien se está esforzando, junto con su equipo de fiscales, para sacar adelante todas las investigaciones pendientes.

“Estamos trabajando fuerte, nos vamos a enfocar en aligerar los procesos, creo que a mediano plazo vamos a ver mejores resultados. Le puedo indicar que va a haber mucho trabajo, no solo de mi parte, sino de los fiscales, para disminuir los tiempos y cumplir el principio de justicia cumplida”, aseguró.

Concluyó diciendo que no tolerará la corrupción dentro de su gestión como líder de las Fiscalías del país.

“No vamos a tolerar la corrupción ni la falta de probidad de los funcionarios, incluso, ya algunos han sido despedidos, no en mi gestión, pero va a ser la misma línea que vamos a mantener en el Ministerio Público”, señaló.

Díaz tiene 25 años de carrera, ya que entró el 1° de enero de 1998 al Ministerio Público.