La muerte de un recién nacido conmovió al fiscal Mario Castro, quien dirigió la investigación contra los padres del inocente, los cuales fueron acusados de homicidio calificado.
El representante del Ministerio Público señaló que esta situación es lo peor que ha visto en su carrera como fiscal y pidió una pena de 30 años de cárcel para la cocinera de apellidos Montero Rojas, de 28 años y su esposo un constructor de apellidos Madrigal Pérez, de 33 años, padres de la criatura.
En apariencia y de acuerdo con la acusación de la Fiscalía, los padres habrían golpeado al pequeño hasta fracturarle el cráneo y dejarle moretones en la ingle.
El fiscal les dijo a los jueces, durante sus conclusiones de este viernes, en el Tribunal Penal de Pavas, que está acción jamás la podía comparar con el actuar de los animales salvajes.
Castro recordó un programa de animales salvajes y dijo que estos se desplazaban miles de kilómetros para tres cosas: número uno alimentarse, dos para protegerse del frío y tres para parir a sus crías, para protegerlos de que otros animales se comieran a sus crías.
“No puedo comparar esta conducta con un animal salvaje, porque tiene más conciencia un animal salvaje que (da nombre de los acusados) quieren más a sus crías un animal salvaje que (nombre de acusados) lo que quisieron a su bebé.
“Un animal salvaje quiere más a sus crías”, afirmó el fiscal.
Dijo que con lo único que lo puede encuandrar es con lo que establece el artículo 112 del Código Penal que se refiere al homicidio calificado.
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Mencionó que otro hijo mayor de la pareja también habría sido víctima de agresiones, este pequeño al igual que sus otros hermanitos están a cargo del Patronato Nacional de la Infancia (PANI).
“Les pido que hagamos justicia, hay un bebé que está esperando justicia”, concluyó Castro.
El pequeño nació el 24 de abril del 2019 en el hospital San Juan de Dios y murió a los 13 días de nacido en Alajuelita.