Un joven estudioso, amante del deporte, casero, con ambiciones de superarse eran parte de las características del universitario Carlos Luis Calderón Madrigal.
Este estudiante de ingeniería mecánica, de 19 años, fue asesinado la noche del jueves 9 de marzo del 2017.
Los familiares del estudiante tuvieron que revivir ese momento un año después del crimen, debido a que este miércoles comenzó el juicio contra el sospechoso, un exreo de apellido Calderón, alias Chucky.
El día que lo atacaron, "Charlie", como le decían de cariño, regresaba de clases y esperaba el bus en las paradas de San Rafael Abajo de Desamparados, en San José centro. En ese momento "Chucky" lo amenazó y le pidió las pertenencias.
El muchacho se negó y hubo un forcejeo. El sospechoso lo agarró del cuello y lo tiró en el suelo, luego lo apuñaló dos veces. El investigador del OIJ que llevó el caso, dijo que antes de que fuera herido el estudiante gritó: "¡Auxilio, me están asaltando!".
El delincuente no pudo robarse nada de valor económico, pero si le robó la vida al joven y la paz a la familia del muchacho.
Un taxista auxilió al universitario y lo llevó al hospital San Juan de Dios, donde falleció debido a las heridas.
Viven con el dolor
Marlen Calderón, hermana del fallecido, dijo que esta dura situación les cambió la vida y no para bien.
“Es un dolor con el que vivimos todos los días y no es justo que otra familia pase por esto”, dijo la hermana.
La familiar agregó que esperan que los jueces le metan la pena máxima al acusado.
“Si bien es cierto nunca vamos a recuperar a mi hermano, pero una persona como él (sospechoso) no puede estar en la sociedad”, afirmó Marlen.
El Ministerio de Justicia confirmó que el acusado descontó una pena de tres años por robo y había salido libre en enero del 2017, meses antes del mortal ataque.
Juzgado por otros delitos
Durante la investigación las autoridades judiciales se enteraron de que "Chucky" después de haber obtenido la libertad, se dedicó a asaltar en las cercanías del Colegio de Señoritas y las paradas de buses de esa zona.
De acuerdo con la acusación, cuatro días antes del crimen del universitario, Chucky había atacado a otro hombre identificado como Rafael Ángel Quesada, a quien le robó el celular y también lo apuñaló dos veces. A pesar de las heridas sobrevivió.
La captura de este sujeto la realizaron los oficiales de la Fuerza Pública, Jason Acuña y Christopher Chacón, el domingo 12 de marzo del 2017 en San José centro.
Al sospechoso lo acusan de robo agravado, tentativa de homicidio, un homicidio y una tentativa de robo.