Sucesos

Víctima del “Dormilón” cuenta cómo el desalmado se hizo pasar por un amigo y casi lo lleva a la tumba

El Dormilón, un hombre apellidado Rojas Cerdas, recibió un merecido castigo por la fechoría

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Detienen a sospechoso de dormir a víctimas para robar en sus casas. Foto OIJ.
El Dormilón fue condenado por el daño que le hizo a Carlos. Foto OIJ.

El deseo de conocer a una persona para entablar una bonita amistad estuvo a punto de llevar a un hombre a la tumba, pues detrás de la apariencia de hombre bueno y respetuoso que proyectaba ese “amigo” se escondía un desalmado criminal.

Esto fue lo que le sucedió a “Carlos”, a quien llamaremos de esa forma para proteger su identidad, pues él fue una de las tantas víctimas de un delincuente apellidado Rojas Cerdas, a quien policialmente, se le conoce como el “Dormilón”.

“Como yo le digo a mi mamá, uno nunca se imagina conocer a una persona y que venga con esas intenciones, porque él fue respetuoso, amable, hasta gracioso y superbuena nota conmigo”, dijo Carlos.

Afortunadamente, este caso tuvo un buen final, pues gracias a la denuncia que Carlos presentó en el año 2020, el pasado jueves 24 de octubre un Tribunal Penal dictó una condena de ocho años de cárcel contra Rojas, quien fue encontrado culpable del delito de robo agravado.

Este sujeto se ganó el apodo del Dormilón por la forma en la que cometía sus fechorías, pues usaba dosis de medicamentos como Lorazepam o Clonazepam para dormir a sus víctimas y robarles sus pertenencias.

Carlos le contó a La Teja que su caso ocurrió en diciembre del 2020, cuando por medio de la aplicación Badoo (app usada para citas) conoció al Dormilón, quien se le presentó como “Alberto”.

“Él me decía que venía a ver una familia que tenía en Sarchí, que si nos podíamos ver y yo le respondí que sí. Para mi era relativamente cerca verlo en el parque y hablar con él, así como una amistad normal.

“Nos vimos como tres veces de esa forma, aunque hablábamos todos los días por WhatsApp, como pasa cuando uno se está haciendo amigo de alguien, yo en ningún momento le vi alguna malicia”, recordó la víctima.

Después de ese tercer encuentro Carlos le contó al sujeto que deseaba ir de paseo a un cerro que quedaba cerca de su casa, a lo que Rojas le dijo que le encantaría acompañarlo; incluso, le salió con que había cambiado su día libre para poder ir con él.

“Ese día salí del trabajo a las 6 a.m. y llegué a mi apartamento; como de costumbre me puse a lavar ropa, pero me acordé que tenía que ir a comprar unas cosillas, porque no tenía nada en el departamento, y yo estaba pensando qué le iba a dar de comer cuando regresáramos del cerro; además, aproveché para sacar efectivo”, recordó.

Detienen a sospechoso de dormir a víctimas para robar en sus casas. Foto OIJ.
De acuerdo con las autoridades, Rojas usaba medicamentos para dormir a sus víctimas. Foto OIJ.

Tras llegar al apartamento, el sospechoso se ofreció a calentar un pinto que Carlos había hecho; incluso, hizo un fresco para que ambos comieran antes de ir al cerro.

Una vez que terminó de desayunar Carlos se preparó para ir al cerro, pero su amigo estaba muy insistente en que esperaran un rato ahí, aunque al final aceptó que salieran de una vez al paseo.

“Como a veinte metros del apartamento hay un puente y cuando íbamos por ahí yo me sentí mareado y con la vista borrosa, pero pensé que era cansancio, porque había salido del trabajo a las 6 a.m. y me había pegado el Sol. Entonces nos devolvimos al departamento, le dije que viéramos una película por mientras y luego de que me senté ya no recuerdo absolutamente nada”, contó.

Carlos cayó en un profundo sueño, del que despertó hasta las 5 p.m., pero a los pocos segundos de abrir sus ojos se dio cuenta que había caído en la trampa del Dormilón.

“Al revisar bien vi que me faltaba la computadora y mi teléfono, las mesitas de noche estaban todas rebuscadas, porque yo en una tenía un cuaderno en el que tenía guardados ¢850 mil que estaba ahorrando. También se robó la olla arrocera, la freidora de aire y el sartén”.

Según la víctima, el sinvergüenza incluso tuvo tiempo de bañarse en su apartamento. Esto lo descubrió al encontrar mucha espuma en la ducha, además de que el sujeto desperdició el champú que Carlos mantenía para cuando lo visitaban sus dos mejores amigas.

Detienen a sospechoso de dormir a víctimas para robar en sus casas. Foto OIJ.
Al momento de ser detenido el Domilón tenía en su poder objetos que al parecer había robado. Foto OIJ.

“Yo me acuerdo que se me abrió el telón, me desperté y traté de abrir la puerta, luego de eso se me cerró el telón, porque yo no recuerdo cómo llegué hasta el centro del lugar donde vivía. Luego le pregunté a un chofer de bus si había visto a ese hombre, pero me dijo que no”.

“Yo recuerdo hasta el otro día cuando ya estaba frente al edificio del OIJ, luego se me nubla la mente y lo que recuerdo es estar en medicatura forense orinando en un vasito”.

—  Carlos, víctima del Dormilón.

En medio de la angustia que sentía por el engaño y el robo del que fue víctima, Carlos recibió otra noticia que lo dejó frío, pues en dos platos le dijeron que estuvo muy cerca de perder la vida por culpa de ese “amigo”.

“Cuando me dieron los exámenes recuerdo que la doctora de medicatura forense me dijo: ‘Dele gracias a Dios que usted está vivo, porque la gran dosis que a usted le dieron de Clonazepam o Diazepam fue tan fuerte que pudo matarlo, porque usted padece de la presión’. Esas palabras me quedaron para siempre”.

Un detalle muy importante fue que Carlos logró recuperar sus chats de WhatsApp, por lo que pudo aportar fotos del sujeto al OIJ, las cuales fueron claves en el caso.

“Nadie encontraba nada de él, hasta que un día vi en la televisión el caso del “Dormilón”; al verle la cara me di cuenta que era la misma persona, entonces de inmediato llamé al OIJ para decirles que yo tenía una demanda contra ese mismo sujeto”.

La Policía Judicial detuvo al Dormilón en setiembre del 2022, y para ese momento era investigado por cinco causas por un perjuicio de más de ¢80 millones.

“Esto me ha traído problemas psicológicos de que ya no quiero salir de mi casa, yo quedé desconfiado; ando en bus y se me mete en la mente que alguien me va a robar o hacerme daño, y, a veces, es tanto que me tengo que incapacitar porque no puedo salir”, contó el afectado.

Carlos dijo que tomó la decisión de dar a conocer su caso para que así otras personas afectadas por este sujeto lo denuncien y se haga justicia por el daño que les hizo.

Adrián Galeano Calvo

Adrián Galeano Calvo

Periodista de Sucesos y Judiciales en el periódico La Teja desde 2017. Cuenta con un bachillerato en Relaciones Públicas de la Universidad Latina y una licenciatura en Comunicación de Mercadeo de la UAM. En el 2022 recibió el premio a periodista del año del periódico La Teja.

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