Aunque la aprobación de la Ley de Bienestar Animal fue celebrada como un gran avance para el país, lo cierto es que aún tiene serios vacíos, entre ellos, uno legal que prácticamente deja sin castigo penal a los dueños de animales que agredan o maten a una persona.
Si bien dentro de esta ley, en el artículo 22, se indica que el dueño de un animal debe responsabilizarse de los daños que este provoque, únicamente se habla en términos civiles, es decir, la plata que debería pagar como sanción, más no de un castigo a nivel penal, como cárcel.
De acuerdo con el abogado Rafael Rodríguez, aun cuando el animal ataque o mate a una persona el caso no llegaría a ser considerado como un delito penal en contra del dueño, sino que solamente se manejaría como una contravención, es decir, nada más tendría que pagar los días multa que establezca el juez, basado en el artículo 405 del Código Penal.
Según el penalista, un caso de estos tendría que ser bien analizado desde todos los puntos para ver si cabe la posibilidad de la figura culposa por parte del dueño; sin embargo, señaló que es complicado que pase más allá de una contravención.
Debe llenarse
Para Otto Guevara, diputado del Partido Movimiento Libertario, este vacío en la ley debe llamar la atención de los jueces, pues no es suficiente con que el dueño de uno de estos animales pague cierto monto de dinero, cuando una familia ha perdido a un ser querido por negligencia.
“Me parece que ese vacío legal debería ser llevado a los tomadores de decisión política para que así se pueda legislar y quede claro que la persona que no tiene el debido cuidado sobre sus animales y estos le hacen daño a un tercero, el dueño debería tener un tipo de responsabilidad penal”, aseguró el candidato presidencial.
Para el político, debería existir la posibilidad de que el dueño de un animal que mate a una persona enfrente un cargo de homicidio culposo, en donde dependiendo del análisis de los jueces pueda exponerse a penas de seis meses a ocho años de prisión.
“Es igual al chofer que con su vehículo atropella a alguien sin culpa, entonces, se debe afrontar un proceso penal. Podría explorarse una posibilidad de este tipo para llevar esta clase de casos con animales a nivel penal”, dijo Guevara a La Teja.
La doctora Iliana Céspedes, jefa del Programa de Bienestar Animal del Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa), también coincidió con Guevara.
“Solo hay trámites administrativos, hay un vacío ahí que es importante y la cantidad de mordeduras (ataques de perros) que se dan al año son muchísimas. La gente tiene que aprender a criar a sus perros. Una de cada cuatro personas tiene perros y muchísimos tienen desconocimiento de cómo se cría bien, si la gente supiera eso, se prevendría mucho”, insistió Céspedes.