Marcela Garita hubiera deseado abrazar mucho más de lo que lo hacía a su amado sobrino Julián, pues ahora le duele en el alma saber que nunca más va a tenerlo entre sus brazos, todo por culpa de un trágico accidente de tránsito que le arrebató la vida al niño.
Julián es el chiquito, de 5 años, que perdió la vida la tarde de este miércoles 3 de mayo en Morazán de Atenas, en Alajuela, cuando un carro fuera de control le cayó encima tras volcarse y dar varias vueltas.
“La vida es demasiado efímera, todo pasó tan rápido. Uno desea haberlo abrazado más, haberlo chineado más y es que uno siempre está confiado en que los niños van a crecer”, dijo Garita a La Teja
La tía del menor contó que el incidente ocurrió cuando su sobrino caminaba junto a su mamá y a su hermano mayor, quien de milagro se salvó de ser embestido por el carro.
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“No hay forma de explicar lo que sentimos, en nuestra familia nunca habíamos perdido a nadie y ahora estamos perdiendo al más pequeñito”.
— Marcela Garita, tía de Julián.
La mamá de Julián sí fue golpeada por el vehículo, pero sobrevivió al accidente y fue llevada al hospital San Rafael de Alajuela
“El otro hijo de ella iba adelante y se metió en la casa de un compañerito de la escuela, al frente de donde pasó eso, de no haber sido así, el carro se los hubiera llevado a los tres.
“A mi hermana ya le dieron la salida y está bastante golpeada, tiene un pulmón inflamado, el tórax y las piernas golpeadas, tiene la cara rota, físicamente está bien, lo que está mal es emocionalmente, todos estamos mal”, explicó.
Garita dijo que una de las últimas personas que pudo disfrutar de la sonrisa de Julián fue su mamá, es decir la abuela del niño, pues estuvo junto a él poco antes de que ocurriera el accidente.
“Mi mamá dijo que él entró a la casa y le dio el teléfono y le dijo: ‘Abuela, tomé ya le arreglé el teléfono’ y se fue con mi hermana, en cuestión de minutos fue que pasó eso”.
Aprendiendo a manejar
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) reveló que el carro que causó la muerte de Julián era conducido por una joven, de 20 años, cuya identidad no se dio a conocer, y quien viajaba junto a un hombre.
Marcela le dijo a La Teja que ella y su familia conocen a la conductora, pues la muchacha es hija de una de sus primas y viven a escasos metros de la casa del chiquito.
“Lamentablemente, fue la hija de una prima de nosotros, ella iba sacando el carro y parece que se quedó sin frenos y se vino dando vueltas desde arriba (de una cuesta) y se llevó a mi hermana y al chiquito”, contó.
“Él siempre estaba contento, siempre estaba feliz, solo tenía palabras bonitas para todos, abrazaba a todo mundo y les decía que los amaba”.
— Marcela Garita, tía de Julián.
Garita también confirmó a este medio la versión que circulaba entre los vecinos, de que la muchacha que conducía, estaba aprendiendo a manejar.
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“Ella estaba aprendiendo a manejar, ni siquiera sabía manejar, yo no entiendo cómo agarró un carro sin saber manejar, son cosas que nosotros no entendemos”, añadió.
La tía del chiquito también contó que por cosas del destino, su hermana y el pequeño Julián se dirigían hacia la casa de la mamá de la conductora cuando ocurrió el fatal hecho.
Por su parte, la oficina de prensa de la Policía Judicial, ante una consulta de La Teja, también confirmó que la joven que manejaba el carro no contaba con licencia de conducir.
Este jueves, el Organismo de Investigación Judicial informó que el carro fue decomisado y será inspeccionado para determinar si el accidente se dio por una falla mecánica o un error humano.
El más amado
Garita recordó a su sobrino como un niño muy alegre y muy querido por todos los vecinos del barrio, por su forma tan especial de ser, por eso es que se vive un gran luto en toda la comunidad de Morazán de Atenas.
“Julián era el niño más amado de este mundo, nosotros solo le dimos amor y él nos respondió de la misma forma. Cuando uno salía pasaba pensando en comprarle cositas, le encantan los Hot Wheels (carros de juguete). De estos cinco años que Dios nos lo prestó, lo hicimos feliz entre todos”.
La tía de Julián también contó que el chiquito estaba muy contento, pues este año empezó a recibir clases en preescolar y a diferencia de otros niños a Julián le encantaba ir a la escuela para compartir con sus compañeritos.
“Estaba en preescolar, este año había entrado y todos los días se levantaba lo más contento, solito se levantaba e iba todo feliz. Recuerdo que le tomaban fotos porque él siempre iba tan guapo, le encantaba oler rico”, añadió.
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Las escuelas de Morazán de Atenas y la central de Atenas usaron sus perfiles Facebook para enviar un mensaje de solidaridad a la familia del chiquito.
“Hacemos extensivas nuestras condolencias a la familia y amigos de Julián, orando para que la paz y el consuelo de Dios los cobije”, publicó la escuela Central de Atenas.
Marcela dijo que su sobrino será velado a partir de las 5 p.m., de este jueves en la Funeraria Atenas, y su misa se realizará este viernes, a las 9 a.m., en la parroquia San Rafael.