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El hombre sospechoso de asesinar a una joven en San Rafael de Poás la noche del domingo en las afueras de un bar, ha sido investigado por las autoridades por robo de vehículos y tiene varios tatuajes que lo hacen fácil de identificar.
Se trata de Jesús Alberto Arce Céspedes, de 30 años, a quien los agentes del OIJ buscan hasta debajo de las piedras porque es el principal sospechoso del homicidio de Kassandra Sánchez Ballestero, de 19 años, la joven que soñaba con convertirse en nutricionista.
La oficina de prensa del OIJ difundió la fotografía del sospechoso la noche del lunes, indicando que la delegación regional del OIJ de Alajuela necesita la ayuda de la ciudadanía para dar con el paradero de este sujeto.
El homicidio ocurrió en las afueras del bar El Rey, cuando dos sujetos (uno de ellos sería Arce) empezaron a discutir y a ofenderse.
Arce había estado como cliente en ese bar, y durante el enfrentamiento Kassandra trató de calmar los ánimos para que los muchachos no se agarraran, pero Arce, aparentemente, sacó el arma y disparó contra la joven y el hombre con el que discutía. Ella murió al recibir un disparo en el pecho.
Arce y la víctima no tenían relación de ningún tipo.
La comunidad de Poás es muy organizada y cuentan con cámaras de vigilancia, una de ellas da con el bar, los videos fueron entregados a las autoridades judiciales y por esa razón señalan a Arce como sospechoso.
El carro del sospechoso fue localizado en las afueras del bar el día del crimen; sin embargo, a bordo solo estaba uno de sus amigos.
Las autoridades sospechan que el hombre podría estar en Upala donde tiene varios familiares, el hombre no tenía trabajo, y vivía con su mamá en Tambor, en Quebradas de Alajuela.
Según una fuente judicial, uno de los casos en los que estuvo relacionado ocurrió en Ciudad Quesada, pero no soltó más detalles.
En la página del Poder Judicial aparecen dos recursos de amparo presentados por privados de libertad, el primero detalla que son reos de la cárcel Gerardo Rodríguez y La Reforma que no están de acuerdo con la Telesecundaria que se iba a aplicar, pues querían que se mantuvieran las opciones de clases que tenían en ese momento.
Además, el otro recurso en que figura su nombre fue presentado en marzo del 2019 y hace referencia a que él y otros privados de la cárcel Jorge Arturo Montero (Reforma) están disconformes porque algunos de sus compañeros fueron trasladados al Centro de Atención Institucional de Guápiles por los problemas de hacinamiento que había y que eso iba afectar las visitas de algunos compañeros. Pero al final se los rechazaron. En ese recurso figura el nombre de un conocido modelo de apellido Ramos que fue absuelto de un homicidio en Alajuela cuando defendió a su hermano.
Al sospechoso le dicen Chucky y tiene un tatuaje en el cuello que dice “chuz”. Además en cuatro dedos de la mano izquierda tiene una letra en cada uno que forman su apellido Arce. Cuatro dedos de la mano derecha forman la palabra Poás. Tiene otros tatuajes con nombres en distintas partes del cuerpo como el pecho, abdomen y piernas.
Además, tiene una cicatriz del lado izquierdo de la cabeza.
En sus redes sociales la mayoría de fotos fueron publicadas entre el 2018 y 2020 y son en la cárcel acostado en los camarotes de las celdas.
“Aquí la gente lo conoce de vista, pero como que sea del pueblo no, daba vueltas por aquí, más bien lo que dicen es que salió de la cárcel hace un año. El día que se dio el asesinato de Kassandra fue una terrible coincidencia que ella tratará de separarlos, porque este hombre, el sospechoso, le gritó algo a otro muchacho y eso provocó todo”, dijo uno de los allegados de Kassandra, quien prefirió no decir su nombre.
“Hay gente que habla sin saber y pone en redes sociales que en la casa nada le hubiera pasado, pero eran las 7 de la noche y ella ya era mayor de edad y hasta con permiso andaba porque era una muchacha sin vicios y querida por todos. La comunidad no pierde la esperanza de que capturen al sospechoso, lo único que hizo fue desgraciar la vida de una familia y de una muchacha que era amada por todos, que sí iba a ser alguien de bien”, añadió.
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La jovencita fue despedida la mañana de este martes en la iglesia católica de Poás y fue sepultada en el cementerio de la comunidad.
“Hoy fue mi hija la que enterramos, mañana puede ser cualquier otra. Es un dolor que nos arranca el corazón a la familia, amigas y a un pueblo entero. Le apagaron los sueños y las metas a una persona de 19 años recién cumplidos “, dijo Sonia Ballestero al periódico Mi Tierra durante el funeral.
Si usted tiene información sobre este sujeto o sabe dónde podría estar, contacte al OIJ al teléfono 800-8000-645 del Centro de Información Confidencial.
