Un extranjero de apellidos Herrera Martínez y 38 años es el sospechoso principal de la muerte de la anestesióloga María Luisa Cedeño, de 43 años, en una habitación del hotel donde ella se hospedaba en Manuel Antonio.

Aparentemente Herrera era hombre de confianza del administrador del hotel La Mansión Inn.

Según información del OIJ, Herrera trabajaba como ayudante del administrador, a quien le hacía mandados y a cambio de sus labores, supuestamente se le permitía quedarse en una de las habitaciones. Las autoridades confirmaron que tenía cerca de un año de vivir en el hotel.

La Policía Judicial detuvo al nicaragüense en La Mansión Inn la noche de este lunes 20, el mismo día en el que se descubrió que anestesióloga había sido asesinada en el cuarto 21.

Las autoridades informaron que el cuerpo de la doctora, quien era jefa del área de anestesia en el Hospital Cima, en Escazú, fue encontrado envuelto en una cobija, golpeado y con heridas de puñal.

En la habitación había rastros de sangre y mucho desorden.

Vista por última vez

Trascendió que la anestesióloga llegó al hotel el sábado 18 y reservó hasta el lunes 20. Viajó sola y llevaba a su perrita Mafalda.

Según la investigación preliminar del OIJ, el homicidio habría ocurrido entre la noche del domingo y la madrugada del lunes, porque Cedeño fue vista por última vez el domingo a eso de las 9 de la noche, cuando bajó a la primera planta del hotel para pedir una botella de vino. Luego no se supo más de ella.

La Policía Judicial señaló que a Herrera se le relacionó con el homicidio debido al testimonio de varios testigos y a evidencias encontradas por los investigadores; sin embargo, no dieron detalles.

Lo que sí se sabe es que, aparentemente, el extranjero trabajó un tiempo como guarda en el hotel, pero no funcionó en el puesto y el administrador le habría ofrecido hacer labores de ayudante.

Este antecedente también hizo que el OIJ pusiera su mira sobre el nicaragüense porque no se descarta que él tuviera acceso a una especie de llave maestra para abrir cualquier habitación.

Eso explicaría por qué la puerta de la habitación de la anestesióloga no estaba forzada.

Viaje para despejarse

Maripaz Tormo, amiga de la anestesióloga, la recordó como una mujer apasionada por la vida y quien por ser de La Fortuna de San Carlos tenía, dijo, un “espíritu de finca, de amar la naturaleza”.

“Luisa era una persona superespecial, le encantaba ser una buena amiga, le fascinaba viajar, conocer lugares nuevos, le gustaba hacer deporte, amaba los perros y los caballos. Era relajada en la vida, vivía con una sonrisa, les hablaba hasta a las paredes y siempre se preocupaba por los demás”, detalló.

Maripaz también la describió como muy profesional y trabajadora, una mujer que se esforzaba por dar lo mejor de sí para ayudar a sus pacientes, sobre todo con la situación que se vive en el país por el covid-19.

“Ella era la jefa de Anestesia del Hospital Cima y con todo esto del covid había estado muy estresada, por eso decidió salir el fin de semana para despejarse. De hecho iba a regresar el lunes para una cirugía”, contó.

Gran pérdida

Maripaz recordó que durante el fin de semana María Luisa escribió en un chat de amigas que estaba prácticamente sola en el hotel y que la playa estaba desierta; sin embargo, no se encontraba angustiada por esa situación.

“Uno piensa, si él quería robarle, ¿por qué no lo hizo mientras ella no estaba? No es justo que cobren una vida por cosas materiales”, añadió.

La amiga dijo que la muerte de María Luisa es un golpe para su familia, para sus seres queridos y para el país por la clase de profesional que era.

“Es una gran pérdida por su persona, su profesión y su especialidad, porque hay pocos en el país y además, era de los pocos que están capacitados para atender esta emergencia del covid”, señaló.

En cuanto al sospechoso, el OIJ informó la tarde de este martes que todavía no había sido pasado a Fiscalía. Aún había agentes trabajando en la habitación donde la profesional fue hallada muerta.