Para la tranquilidad de muchos, los dos socollones que del domingo no tienen nada que ver con el fuerte terremoto que varios expertos pronostican que ocurriría en pocos años en la zona sur del país.

Así lo explicó Marino Protti, sismológo del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori), quien desde hace algún tiempo dio a conocer que cada 40 años ocurre un terremoto de más de siete grados en esa zona. El último ocurrió el Sábado Santo de 1983 y fue de 7,2 grados.

“Debajo de la Península de Osa hay una cantidad de deslizamientos que se han retenido del choque de la placa del Coco bajo la placa de Panamá y ya llevamos más de treinta y cinco años desde que ocurrió el ultimo deslizamiento. Esta es una región que tiene que presentar terremotos importantes para restablecer el equilibrio en esa zona”, detalló Protti.

El experto señaló que en su opinión los meneones del fin de semana pasado en Corredores y Parrita no tendrán mayores efectos en la liberación de energía en esa zona, pues ocurrieron por procesos diferentes.

“Nosotros continuamos poniendo más estaciones para tratar de ver si en pocos años podemos estimar la zona de ruptura de ese terremoto antes de que ocurra, tal y como lo hicimos con Nicoya cuando determinamos la zona que se iba a deslizar”, añadió.

Domingo movido

El primer meneón de este domingo fue a la 1:24 p. m. y de acuerdo con el Ovsicori tuvo una magnitud de 6 grados, tuvo una profundidad de 17 kilómetros y su epicentro fue tres kilómetros al oeste de Paso Canoas, Corredores.

“Este ocurre por el contacto de la placa del Coco y la placa de Nazca, es lo que se conoce como una falla transformada. La placa del Coco se mueve hacia el norte con respecto a la de Nazca y además se introduce por debajo de la placa de Panamá en la zona sur del país, justamente debajo de la Península Burica”, detalló Protti.

La segunda movida de suelo se dio a las 7:01 p. m., 10 kilómetros al noroeste de Parrita, Puntarenas. Este sismo tuvo una magnitud de 4,9 grados y una profundidad de 22 kilómetros.

“El sismo ocurrió por debajo de la Península de Herradura, esto es en la zona de subducción (hundimiento) en donde la placa del Coco se introduce por debajo de la placa Caribe. El sismo no se dio por el contacto entre las placas sino por una deformación (fractura) interna en la placa del Coco que se produce cuando esta se dobla”.

Sin relación

Así como descartó que estos sismos sean un aviso del terremoto que se espera en la zona sur, Protti también indicó que los socollones no tienen ninguna relación entre sí, es decir, fue pura casualidad que se dieran el mismo día.

De acuerdo con el Ovsicori, a este lunes se registraron más de 80 réplicas de estos dos sismos, sin embargo, muy pocas se sintieron.