Dos hombres pasarán en la cárcel 39 y 25 años por disparar contra un hombre varias veces y después privar de libertad a su hermano de 16 años y matarlo.
El Ministerio Público informó que la pena fue dictada por el Tribunal Penal de Liberia contra los hombres de apellidos Córdoba Cheves y Meza Chaves.
Córdoba deberá descontar una pena de 39 años de prisión, por los delitos de tentativa de homicidio, homicidio, robo agravado y portación ilícita de arma permitida, mientras que Meza fue sentenciado a 25 años por homicidio y robo agravado.
El caso ocurrió el 16 de noviembre del 2020, a las 8;40 de la noche en Curime en Liberia de Guanacaste, cuando la víctima de apellidos Canales Artavia, según probó la Fiscalía, recibió un disparo por parte de Córdoba, quien lo hirió en el tórax y el brazo derecho.
“El despacho probó que Córdoba y Meza amenazaron de muerte al hermano menor de Canales y que, el 17 de febrero del 2021, aprovecharon que este se encontraba a solas y lo privaron de libertad. La Fiscalía acreditó que, dentro de un carro, los imputados golpearon en reiteradas ocasiones a la víctima y luego la trasladaron a un sector conocido como Danta. Una vez en ese sitio, los imputados le quitaron un reloj al ofendido y, posteriormente, le dispararon en siete ocasiones, impactándolo en la cabeza, dorso y pierna”, dijo el Ministerio Público.
El joven fallecido era José Fabio Sánchez Canales, de 16 años, quien soñaba con convertirse en chef. El muchacho falleció en el sitio.
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“El Ministerio Público logró evidenciar que Córdoba y Meza se retiraron de esa zona, y luego solicitaron un servicio de taxi informal. Sin embargo, en ese momento, fueron abordados por oficiales de Fuerza Pública, ya que estos habían sido alertados del homicidio de la persona menor de edad; así decomisaron el arma de fuego y el reloj que habían sustraído a la víctima”, indicó la Fiscalía.
Patricia Canales, tía de José Fabio, había contado a La Teja que la muerte de su sobrino reabrió la herida que les causó el fallecimiento de su hermana, Jéssica Canales Artavia, de 33 años, quien fue asesinada en febrero del 2013 por su expareja, apellidado Brenes Zúñiga, quien fue condenado a 35 años de cárcel por ese crimen.
“Yo le digo a la gente que fue como revivir todo, porque es el mismo camino y casi el mismo lugar, lo de mi hermana fue demasiado trágico porque fue asesinada y quemada, y mi sobrino es asesinado y tirado en ese lugar, entonces es como revivir esa pesadilla”, contó.
Los condenados estarán en prisión preventiva hasta mayo del 2023.