Como un baldazo de agua fría, así fue como la familia del joven Manfred Barberena Novoa, de 23 años, recibió la sentencia que se dictó la tarde de este martes por el atroz crimen del que fue víctima en junio del año pasado.

Esto se debe a que la familia recibió lo que ellos llamaron una justicia a medias, pues uno de los acusados por el homicidio de Manfred, apellidado Díaz Mejía, fue absuelto por dudas, mientras que una imputada apellidada Vargas Solano recibió una condena de 19 años de prisión por los delitos de homicidio y robo agravado en grado de tentativa.

Así lo contó a La Teja doña Esperanza Novoa, tía de Manfred, quien dijo que la sentencia fue dictada por los jueces del Tribunal Penal del Primer Circuito Judicial de San José a eso de las 5 p.m. de este martes 19 de marzo.

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“Solo condenaron a la mujer, porque aparentemente, las pruebas contra el otro muchacho, en apariencia, estaban como un poco dudosas, entonces ese fue el detalle, como que hubo muchos enredos”, dijo Novoa.

En cuanto al tercer acusado por el homicidio del joven, un hombre apellidado Chacón Parajeles, se dio a conocer que contra este se realizará un juicio aparte, debido a que su abogado ha estado incapacitado. Chacón es el principal sospechoso en este caso.

Insatisfechos

Doña Esperanza dijo que la sentencia dictada por los jueces este martes tomó por sorpresa a toda su familia, pues ellos esperaban que ambos acusados recibieran un castigo muy fuerte por la atroz muerte de Manfred.

De hecho, en horas de la tarde el fiscal Alexander Mora había solicitado la condena máxima contra ambos imputados, la cual era de 35 años de prisión, señalando que estos dos, junto con Chacón, conspiraron para llevar a cabo la golpiza que terminó con la muerte de Barberena.

“Como comprenderá esto es una gran tristeza para toda la familia, porque tanto que hemos esperado, más de un mes de todo este proceso, y ahora pasó esto, fue como un baldazo de agua de fría para todos nosotros”, dijo Novoa.

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La tía de Manfred contó que la mamá del muchacho, doña Florencia Novoa, fue la más afectada al escuchar la sentencia, hasta el punto de que fue una de las primeras en irse tras conocer que Díaz fue absuelto.

“Nos duele mucho, porque Manfred era un muchacho bueno y muy joven, y que unos tipos como estos vinieran a quitarle la vida y todos los sueños que tenía por cumplir, y que todavía no paguen por eso es algo muy duro para nosotros”, agregó.

Según contó la familiar de Novoa, el abogado de la familia les explicó que la sentencia integral estaría lista el próximo 2 de abril, por lo que él la analizaría para ver si se puede presentar un recurso de apelación.

Dudas jugaron a su favor

Durante la lectura de la sentencia, el tribunal explicó que la absolutoria a favor de Díaz se dio por el principio de Indubio prorreo, pues no se presentaron pruebas suficientemente contundentes para demostrar su participación en el homicidio. Pese a la absolutoria, Díaz no fue dejado en libertad, pues los jueces indicaron que habría otra causa penal en su contra.

Agustín Gutiérrez, abogado de Díaz, sostuvo este argumento durante sus conclusiones, señalando que en los videos presentados por la parte acusatoria no se podía corroborar con plena certeza la identidad de su defendido.

En cuanto a Vargas, los jueces no tuvieron ninguna duda sobre su participación en los hechos, motivo por el cual la condenaron a 20 años de cárcel, pena que fue rebajada a 19 años, pues la consideraron como una mujer en condición de vulnerabilidad.

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Según las pruebas presentadas en el debate, mientras que dos sujetos atacaron a Manfred con un cuchillo, Vargas habría participado tratando de sustraer los bienes del muchacho. Lo que no se pudo determinar es si en efecto la mujer logró robar alguna de las pertenencias.

Manfred fue atacado el viernes 24 de junio del año pasado, cuando regresaba de su trabajo e iba para la parada de buses de Salitrillos de Montes de Oca. Según un video que capta todo lo sucedido, dos hombres lo atacaron, uno de ellos le hace una zancadilla y al caer lo hieren cuatro veces con un puñal.

El muchacho fue llevado al Hospital Calderón Guardia, donde trataron de reconstruirle el ventrículo izquierdo del corazón, pero el joven siempre permaneció inconsciente y falleció el domingo 26 de junio.