El milagro por el que tanto rezó Asdrúbal Gutiérrez se hizo realidad, pues su hija Fabiola, de 20 años, despertó tras haber estado sedada por casi dos meses, debido a las lesiones que sufrió en su cabeza en un fatal accidente de tránsito en el que murieron dos de sus amigos.
Gutiérrez le contó a La Teja que las buenas noticias no terminan ahí, pues a la muchacha le dieron la salida del hospital hace cerca de un mes, por lo que ya se encuentra de regreso en su hogar, en Iguanita de Mansión, en Nicoya.
“Ya gracias a Dios ella está con nosotros en la casa. La recuperación va bastante bien, de verdad que es un milagro de Dios”, dijo Asdrúbal.
LEA MÁS: Papá de jugadora de Jicaral accidentada: “Tengo la fe puesta en que Dios va a hacer el milagro”
El accidente que casi le cuesta la vida a Fabiola, quien es jugadora y capitana del equipo Jicaral Sercoba, de la segunda división del fútbol femenino, ocurrió la madrugada del pasado domingo 15 de mayo, cuando viajaba en un carro junto a tres amigos: Shenoa Bolívar, de 16 años y también jugadora de Jicaral; Kevin Contreras Ruiz, de 21, y José David Ugalde Briceño, de 24.
El carro era conducido por Ugalde y, al parecer, este se quedó dormido, lo que provocó que el vehículo se saliera de la calle y chocara contra un árbol en Santa Rita de Nandayure.
Producto del choque, ambos muchachos murieron en el lugar, mientras que Fabiola y Shenoa fueron llevadas al hospital. Bolívar sufrió heridas de gravedad en ambas piernas, pero fue dada de alta ese mismo domingo.
Emocionado
Desde el pasado 22 de mayo, en una entrevista con La Teja, don Asdrúbal nos había dicho que tenía toda la fe puesta en que Dios iba a hacer un milagro para hija y ese anhelo finalmente se cumplió.
Fabiola despertó una semana antes de que le dieran la salida del hospital La Anexión de Nicoya, donde estuvo casi dos meses sedada por completo debido a la inflamación que presentaba su cerebro debido al accidente.
Verla abrir sus ojos fue un momento que este padre nunca podrá olvidar.
“Todo ese tiempo fue muy duro, porque uno esperaba verla despertar y cuando ya lo hizo fue una emoción grandísima, gracias a Dios que sí se dio el milagro”, añadió.
“Ella está deseando volver a caminar, está esperando que le digan que ya puede empezar a dar algunos pasitos”.
— Asdrúbal Gutiérrez, papá de Fabiola.
LEA MÁS: Jugadora de Jicaral que sobrevivió a choque se enteró en el hospital que sus amigos habían muerto
Triste noticia
Gutiérrez contó que, pese a las lesiones que sufrió, su hija se encuentra muy bien, pues habla sin dificultad y no perdió la memoria, lo único que no recuerda es cómo ocurrió el trágico accidente.
“Ella reconoce a las personas y habla sin problemas, lo único que le hace falta es caminar, pero los doctores aún no le han dado permiso para que empiece a dar pasitos”, añadió.
En medio de la alegría que sentía por ver que su hija había despertado y que se encontraba bien, Asdrúbal tuvo que afrontar un momento muy difícil relacionado con los amigos de Fabiola que murieron.
“En el hospital, unos días antes de que la trajéramos para la casa, le contamos lo que le había pasado a los dos amigos de ella, porque empezó a preguntar qué había pasado, entonces tuvimos que contarle todo.
“Ella lo tomó normal, gracias a Dios, sí le dolió mucho, pero lo que nos daba miedo era que le diera una recaída”, contó.
La noche previa al accidente, Fabiola, José David, Kevin y Shenoa organizaron una salida de amigos que se extendió hasta horas de la madrugada y cuando se dirigían hacia Nicoya tomaron la decisión de buscar un lugar para pasar a comer, en ese trayecto fue que ocurrió la tragedia.
Recuperación
El papá de la jugadora contó que en estos días tuvo una cita con el neurocirujano del hospital de Liberia para verificar cómo se encuentra tras el golpe.
Además, contó que el próximo 22 de setiembre tiene otra cita con un médico que revisará como avanza la recuperación de sus piernas, para determinar si puede iniciar con la rehabilitación.
LEA MÁS: Familia desesperada por encontrar a señor perdido hace 5 días en montaña de Cachí
“En cuanto al ánimo, ahí va poco a poco, porque esto es un proceso y eso fue un golpe muy duro, gracias a Dios esta muy bien”.
— Asdrúbal Gutiérrez, papá de Fabiola.
Gutiérrez asegura que las palabras no le alcanzan para agradecerles a todas las personas que estuvieron pendientes de su hija, y que también de alguna u otra forma lo ayudaron a él y a su esposa para que no se separaran de ella mientras estuvo internada.
“A esas personas que nos tuvieron en sus oraciones les digo que Dios les bendiga y que sigan adelante orando por otras personas, así como lo hicieron por mi hija, de verdad estamos muy agradecidos porque de una u otra manera nos ayudaron”.