El sacerdote Mauricio Víquez, sospechoso de supuestos abusos sexuales a menores de edad, no aceptará ser extraditado de manera voluntaria desde México para que responda ante las autoridades costarricenses por las cuatro causas penales por las que se le investiga.
La información fue confirmada por su abogado, Rafael Rodríguez, quien explicó que fue una recomendación por parte de la defensa.
El abogado del cura explicó que cuando se giró la orden de captura internacional fue por la primera denuncia, la cual prescribe el 28 de setiembre. Y por esta se da la solicitud de la extradición
“Aunque es por ese primer caso que se pide la extradición, la solicitud de la Fiscalía y el Juzgado es incluir las tres causas nuevas”, dijo Rodríguez.
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Lo que alega la defensa del exsacerdote es que las últimas tres denuncias ya están prescritas y lo que quieren es “revivirlas” con la reforma al artículo 31 del Código Procesal Penal, que desde mayo pasado permite ampliar el plazo para que personas víctimas de delitos sexuales interpongan la denuncia.
“La recomendación es que no se someta voluntariamente a la extradición para que sea el juez quien nos indique si las denuncias están prescritas o no y si proceden o no”, dijo Rodríguez.
Se le consultó a Ministerio Público sobre la negativa de Víquez; sin embargo, aseguraron que la Oficina de Asesoría Técnica y Relaciones Internacionales (OATRI) no ha recibido documentación oficial que indique la negativa del exsacerdote para la extradición y que eso no impide seguir con el procedimiento entre las autoridades de Costa Rica y México.
Además, indicaron que el expediente contra Víquez ya está en la Embajada de Costa Rica en México y ellos se encargarán de remitirlo a la cancillería mexicana.
La primera denuncia fue interpuesta por un joven de apellidos Alvarado Quirós, y las tres más recientes por Venegas Abarca, Muñoz Quirós y Rodríguez Solera.
Víquez escapó del país el 7 de enero pasado y fue capturado el 18 de agosto.