EscucharJesús Salguero Tencio se ha distinguido por ser un comerciante pulseador en Turrialba centro; sin embargo, las fuertes lluvias y las inundaciones le arrebataron todo el esfuerzo de años.
Él está dolido y angustiado por su futuro, pero tiene la esperanza que no le faltarán manos amigas para volver a levantarse.
Salguero tenía una propiedad cerca de la municipalidad de ese cantón y la alquilaba como parqueo para los empleados del Banco Popular. En el mismo sitio, además, tenía un local en el que vendía llantas usadas, neumáticos y repuestos para vehículos.
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Él llegó la mañana de este viernes 23 de julio al local y vio cómo el río Turrialba se le llevó el parqueo y le falseó el terreno.
Los Bomberos llegaron y hablaron con Salguero para que evacuara, porque su vida estaba en peligro, lo tuvieron que convencer para que saliera lo antes posible.
“Ahorita estamos adoloridos y angustiados, pero diay, tenemos que luchar y seguir para adelante, porque yo siempre he sido un luchador”, aseveró con un nudo en la garganta.
Mencionó que tiene 66 años y toda su vida ha vivido en Turrialba.
“No sé qué hacer, no tengo a dónde ir. A veces se pone uno como sentimental, pero al mismo tiempo si es la voluntad de Dios, yo acepto porque el camino de Dios es el correcto”, comentó.
Salguero comentó que ha vivido situaciones parecidas, pero que mantuvo su negocio porque no tenía a dónde ir.
“Siempre la luché, hice todo lo posible para mantener a mi familia. Tengo doce nietos y siempre les he ayudado... Ahora lo que pido es trabajo”, manifestó, dejando claro que no quiere que le regalen, sino que le den trabajo.
En este negocio evacuaron a cuatro personas.
Del mismo modo rescataron a dos personas que estaban en la sede del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) de Turrialba, ya que el edificio también resultó dañado por la fuerza de la corriente.
