Un hombre de apellidos Sánchez Carrillo, de 36 años, pasará los próximos siete años en prisión por cometer dos tentativas de robo simple.
Sánchez había sido condenado a 18 años de prisión por el delito de robo agravado; sin embargo, en marzo del año pasado los jueces decidieron darle un beneficio de ejecución de la sentencia, por lo que quedó en libertad.
Él habría aprovechado que le soltaron la rienda para volver a hacer de las suyas. El tipo usaba una bicicleta para cometer los ataques.
Los fiscales de la zona demostraron que, entre el 1 de mayo y el 5 de junio del 2019, Sánchez atacó a un quinceañero y a otro menor de 14 años en el centro de Nicoya.
Él se los topó y con violencia intentó quitarles el celular; sin embargo, no logró llevárselos porque los menores se defendieron, luego ellos denunciaron y reconocieron al asaltante.
Las autoridades no descartan que otras personas hayan sido atacadas por Sanchéz. Él es oriundo de San José, pero desde hace más de 20 años vivía en Guanacaste.
Los jueces del Tribunal Penal de Nicoya, al conocer estos hechos, le dictaron una condena de 7 años. La pena fue impuesta este lunes y de inmediato dejaron al sujeto en prisión preventiva con el fin de que la condena quede en firme.